domingo, 27 de enero de 2013

"Es una mano tendida entre viejas y nuevas generaciones de militantes"


AGENCIA PACO URONDO charló Alberto Nadra, autor del libro "Secretos en Rojo. Un militante entre dos siglos". Nadra tuvo una larga militancia en el Partido Comunista (fue dirigente de la Fede en los 70). En el texto, repasa aspectos pocos conocidos del PC y recorre los hechos que llevaron a su alejamiento (y al de su familia) de las filas del PC. 

Por Enrique de la Calle

AGENCIA PACO URONDO: Tu libro lleva un par de meses de publicado, ¿no?
Alberto Nadra: Sí, y por suerte se agotó la primera impresión, Corregidor está sacando la segunda y tenemos una importante repercusión en el país y en Latinoamérica por los temas vinculados al plan Cóndor e incluso en el exterior por las cuestiones del Che. Estoy muy contento y muy emocionado por la devolución de los ex militantes de izquierda y ex militantes de organizaciones sociales y los actuales, lo han recibido con mucho afecto, con mucho cariño, como una especie de mano tendida entre las viejas y nuevas generaciones de militantes para que la militancia no se pierda, sea protagonista y ayude a que el proceso popular siga adelante.
APU: Vos militaste en la federación de juventudes comunistas. El libro, por lo que estuve viendo, generó mucha repercusión entre dirigentes con algunas trayectorias del PC. ¿Es así?
AN: Sí, por supuesto. El libro en general tiene un impacto muy grande, si bien es muy crítico sobre la etapa final, en el sentido del año 86 - 89 donde desaparece el PC como fuerza política principal de izquierda y determinante en la política nacional. A su vez rescata aspectos absolutamente desconocidos de la historia del PC, son conocidos sus errores del 55, pero pocos hechos conocidos como que la primera guerrilla en Argentina que la estableció el Comandante Leonor Cuareta y fue organizada en el Territorio Nacional del Chaco que entonces no era provincia.
Recién fue provincia con Perón, estamos hablando entre los años 38 y 42, incluso, con vinculaciones conMate Cocido en las primeras acciones conjuntas contra los grupos multinacionales, como La Forestal, La Dreyfus o los algodoneros. Está el caso de la Operación Cóndor donde cuento ahí, porque tuve el honor de integrar ese grupo como un grupo de periodistas y de investigadores de distintas especialidades, se encargó en ese momento junto con los servicios de inteligencia de la Unión Soviética, de desenmascarar algún plan Cóndor que estaba exterminando de manera conjunta las dictaduras militares del cono sur a las militancias dentro de los gobiernos militares y a las grandes personalidades, el ex vicepresidente de Chile, el comandante del ejército y miles de militantes. Ese capítulo es fascinante porque se descubre cómo a su vez se descubrió el Plan Cóndor y se insinúan, un tema delicado porque los grupos pinochetistas en Chile siguen actuando, se insinúan algunas acciones de contra ofensiva contra el Plan Cóndor que se desarrollaba en esa época.
Una primicia que te doy porque no está en el libro y que la publicó ABC color de Paraguay, publicó un elemento que yo sabía desde los años 70 pero no podía publicarlo sin autorización de algunas personas comprometidas en el operativo que son los famosos archivos que se descubrieron en Paraguay. El premio Nobel alternativo, Martín Almada, descubre cinco toneladas de grabaciones, de fichas sobre torturas, persecuciones, fotografía de los asesinatos y las fichas de seguimientos en los distintos países. Descubre los archivos de terror del Plan Cóndor que ratifican todo lo que se venía diciendo con una documentación terrible que reconoce en parte los Estados Unidos con algunos documentos desclasificados por el Departamento de Estado estadounidense.
Esa información, la posibilidad de que Martín Almada que es un héroe, porque fue preso y torturado durante la dictadura de Stroessner, de que pudiese ubicar un lugar puntual, geográfico donde estaban ubicados los archivos del terror, se la da un militar comunista que estaba en el gobierno de Stroessner encubierto. Te doy la primicia porque en Argentina no lo sabe nadie. Realmente en el libro no pude publicarlo porque no contaba con la aprobación de gente que podía verse comprometida por los hechos.
APU: Decís en el libro que la primera guerrilla perteneció al Partido Comunista ¿Tuviste algunas charlas o se te acercó algún historiador para pedirte alguna información?
AN: Sí, tengo algunos llamados entre otros, de alguno que cito ahí porque explico entre otras cosas que en general, las organizaciones armadas respetaban mucho el aparato militar del partido. En realidad creían, como la mayoría de los militantes del PC, que era una parte del aparato militar, el conocido frente de autodefensa, que era el encargado de proteger los movimientos de masa, las tomas de universidades, a poder organizarse para que no nos masacren en la plaza como en el 2001. Por un lado había un trabajo hacia las Fuerzas Armadas que logró captar, a veces con dobles agentes, generales, prefectos generales, brigadieres, etc. y por el otro una formación que en general se terminaba en el exterior, de los oficiales y suboficiales que nosotros considerábamos con una estrategia militar distinta a la de las otras organizaciones armadas de los 70.
El PC fue una organización político-militar –que es otro tema que se desconocía hasta ahora- y teníamos una concepción que en última instancia, en momentos de disputa de poder en la Argentina, por el peso de la clase obrera, por el peso del mismo peronismo en la clase obrera, por los centros urbanos decisivos, no pasaba por guerrilla rural ni por focos rurales o urbanos sino por una insurrección armada de masas en que, en última instancia, el pueblo tomara las armas. Para eso necesitaba a sus oficiales y suboficiales a fin de ponerse a la altura de las circunstancias y no que nos barrieran como lo hicieron en la República Española.
En realidad, se abre un debate más profundo sobre lo que fueron las concepciones militares en la década del 70 porque hasta ahora parece que la diferencia entre el PC, el ERP y Montoneros era solamente si creíamos oportuno o no el momento para tomar las armas y la cuestión es un poquito más de fondo. Por eso te comentaba que uno de los historiadores que estaba muy sorprendido porque descubrió que la policía había encontrado en los 60 un campamento de entrenamiento del PC en Icho Cruz, Córdoba, y no entendía como eso se relacionaba con un partido que rechazaba abiertamente –por lo menos en público- la lucha armada y le explico –amablemente , ya que él no tiene la culpa porque nadie lo sabía- que ese era un campamento de autodefensa, que no tenía nada que ver con la preparación militar que en general, se hacía en el exterior, China, Cuba, la RDA, distintos países porque en el único lugar donde podés captare toda la potencialidad de una preparación militar y a su vez recibirla y entrenarte en condiciones serias.
Digo esto en el marco de aquella época y no pensando en la Argentina de hoy ni en la América Latina de hoy. Estamos hablando de los temas que discutíamos en aquella época y cómo había que plantearse ante una situación en que hubiera sido bueno que pudiésemos resistir el golpe. Creo que no tuvimos las fuerzas suficientes.
APU: ¿Y ese brazo militar del PC por cuántos hombres estaba compuesto?
AN: Varía según los años, yo tomo distintas etapas.
APU: ¿En los 70?
AN: En los 70 estamos hablando, entre oficiales y suboficiales, unas 3.000 personas y 5.000 en condiciones de movilizarse rápidamente a depósitos de armas -teníamos fábricas de armamentos propias- para una situación de encarar una lucha de masas del pueblo, por supuesto. 
APU: En el libro también te metés con la última dictadura militar, es conocida la posición del PC. ¿Cuál es el balance que hacen hoy, vos y algunos compañeros tuyos de militancia de cómo se pudo llegar a un error tan tremendo?
Alberto Nadra: Creo que ahí hay una combinación de factores que tienen que ver con que vivíamos una época anterior que era la de resistencia al golpe, se trataba de lograr partir las Fuerzas Armadas para impedir el golpe. Hubo durante muchos años la convocatoria a que militares y civiles enfrentáramos, con un programa de liberación nacional un nuevo país y eso tenés que apoyarlo en esa época, si lo vemos desde hoy con la dictadura militar genocida conocida con los resultados a la vista, no puede caber ninguna duda o, mejor dicho, lo ves con una óptica que no es la de aquel momento.
Ahora sorprende Chávez pero ¿por qué?, porque venimos de esa situación pero no te tendría que sorprender en los 70 porque en los 70 hubo un Torrijos en Panamá, el jefe de un proceso revolucionario cortado de raíz por el imperialismo norteamericano. En los 70 estuvo el General Torres que incluso, tuvo que ver con la muerte del Che pero sin embargo, se levantó y cogobernó con una asamblea popular que se planteaba el socialismo en Bolivia. Velazco Alvarado en Perú que también se planteó reformas nacionalistas profundas. Se veía como posible lograr que una parte del ejército que no fue mercenario, sino que nació en la lucha de la independencia de la nación, pudiera estar de este lado.
Con ese clima de época, con las informaciones equívocas, con la necesidad de enfrentar la información que se tenía en aquel momento, por ejemplo, un sector quería matar 10.000 y el otro 100.000, obviamente había que tomar una actitud inteligente que tácticamente diferenciara entre uno y otro en función de cómo moverse pero de eso no podías hacer una línea política. Era una información para manejarse en la acción política concreta pero no para explicitarlo y hacerle creer a la sociedad que había unos que eran buenos y que los otros eran unos turros asesinos. Éste fue el gravísimo error que cometió la dirigencia del PC durante la dictadura, lo cual –y esto lo quiero decir muy claro- no le impidió a la mayoría de esa dirigencia, una parte de la cual está muerta y desaparecida, y a toda la militancia, luchar por los DD.HH., por los detenidos, por los desaparecidos, organizar las primeras luchas de Luz y Fuerza y de ferroviarios de “trabajo a tristeza”.
En el mismo año 76 secuestraron a Mario Marrero en la General Motors porque inició el “trabajo a tristeza” porque las huelgas estaban prohibidas y a Víctor Díaz, dirigente ferroviario, por hacerlo en los ferrocarriles. Se reconstituyeron durante todo ese tiempo las Juventudes Políticas, se fue reconstituyendo el movimiento estudiantil, ¡en lucha!, contra Martínez de Hoz, contra la represión, contra las persecuciones, y eso tiene un balance. Un balance de 1.500 presos, 500 secuestrados y 100 asesinados.
No es que estaban todos pensando en las divisiones que había entre los militares y si unos eran democráticos y otros anti. Se luchaba y se peleaba con una línea fatídica pero la acción concreta del partido durante la dictadura, creo que fue, como la de muchísimos otros luchadores argentinos, heroica.
APU: El libro también puede, de algún modo, leerse como una reconstrucción de una historia, si se quiere, familiar. Ahí está también, cruzando todo el libro, la historia de los Nadra: Abuelo, padre, hijos, vos y tu hermano.
AN: Bueno, sí, mis sobrinos fueron, después, dirigentes de los centros de estudiantes del Avellaneda, etc., la tradición siguió.
APU: Esos Nadra se enfrentaron después con cierto sector de la dirigencia, según planteás en el libro, fueron maltratados injustamente. ¿Cómo fue redactar esos capítulos más personales (aunque todo el libro lo sea)?
AN: Francamente, creo que a los efectos de la historia argentina, donde el tema militar, financiero, la organización política, la verdadera relación con el Che, que se cuenta por primera vez en algunos aspectos, son los más importantes. El aspecto de la caída del PC es el menos importante pero es, para mí, el más desgarrador, el más doloroso, porque es el fin de toda mi vida, a los seis años ya estaba midiendo a ver si me seguía la policía cuando iba a la primaria. Fui a colegios con nombres falsos y después tuve que rendir cursos libres, fueron años muy difíciles los de mi infancia y la de mis hermanos, el crecimiento y demás entonces, contar la historia del fin de esa gran ilusión, de esa gran epopeya a la que dedicamos nuestra vida, muchos años de prisión de mi padre, mucho dolor en mi compañera tremendamente torturada y con muchos problemas actualmente por las secuelas de esas torturas.
Contarte esa historia, cómo eso se desarma, cómo amigos y compañeros que en algunos casos nos habíamos jugado la vida juntos nos separamos y nos enfrentamos e incluso se producen traiciones de fondo, desde el punto de vista ético, fue lo más terrible, lo más doloroso pero consideré que era necesario que se conociera, más allá de que en la historia eso no ocupe un lugar trascendental. Yo dirigía el periódico de la fede que vendía 100.000 ejemplares y después dirigí el del PC que vendía 200.000, entre la fede y el PC vendíamos 300.000 ejemplares, imaginate lo que eso significa hoy: ¿quién puede hoy vender esa cantidad de ejemplares?
Todos esos militantes que pasaron por la Fede y por el partido y que no entienden por qué se fue todo al diablo, más allá de la caída de l a Unión Soviética, gente que se había jugado la vida, que había estado años presa y torturada. Toda esa gente que fue apartada o se autodestruyó en luchas internas, merecía una explicación. Todos esos militantes que pasaron por el partido y ya no están y aún a los que quedan –que son pocos pero respeto su militancia- creo que merecían una explicación.
Esta no es -ni la considero- la verdad cerrada ni acabada pero esto jamás fue contado y yo lo cuento absolutamente desde adentro de la dirección del proceso que culminó con el quiebre del Partido Comunista y mi verdad, que será parte de una verdad general que contarán todos los que tengan interés en participar, investigar y desarrollar este aspecto, ayuda. Como te decía, la devolución que estoy teniendo de muchos de esos ex militantes es tremendamente emocionante. La gente lee, llora, se emociona, se enoja con el libro, lo vuelve a agarrar y todo esto me lo cuentan y lo tengo en una página de Facebook donde voy publicando una selección de las cosas que me mandan porque estoy recibiendo 10 ó 15 mails y mensajes por día que por un lado me destrozan pero por el otro, son un bálsamo que demuestra que eso, insisto, si bien es pequeño dentro de la historia nacional, era necesario para que otra gente cuente sus historias que son tan importantes como la mía y para que muchos entiendan qué es lo que pasó. No fue en vano lo que hicieron, fue heroico en muchos casos, fueron parte de algo muy importante aunque haya fracasado porque las cosas a veces fracasan y para volver a resurgir quizás pasan décadas.
Tal vez no se llame más comunismo, se llamará comunitarismo o lo que quieras y será parte de un movimiento más general, latinoamericanista, regional, tendrá otra forma pero seguro que no va a ser esta sociedad capitalista que nunca resolvió ninguno de los problemas del ciudadano –o como lo hayan llamado en cada etapa- sino que permanentemente mantuvo la injusticia social, la miseria, la exclusión y la injusticia.

Nota original de la Agencia Paco Urondo

http://www.agenciapacourondo.com.ar/secciones/cultura/10460-2013-01-26-17-45-33.html

viernes, 25 de enero de 2013

Secretos en Rojo: entrevista en Radio Rivadavia

Entrevista que me realizó Jonatan Viale, por Radio Rivadavia, poco antes de la presentación de mi libro SECRETOS EN ROJO...

Audio

http://v.ejes.com/fotos/N26765996.mp3

miércoles, 23 de enero de 2013

Crisis europea: la vieja receta burguesa

   La crisis que afecta a la eurozona es, en manos de las burguesías, la herramienta  que permitirá gerenciar la reconversión industrial, que se basará en la reducción de los salarios y en el fin del estado de bienestar. Ese es el precio que pagarán los pueblos para que las patronales recuperen la competitividad perdida.
    Desaparecido el comunismo hace más de veinte años, el estado de bienestar --creado para frenarlo-- es un lujo que resulta tan obsoleto como caro. Según el razonamiento de las burguesías Europa no puede seguir pagando --medidos en dólares-- salarios siete veces más caros que el promedio del Asia Pacífico y cuatro veces más que el promedio de los países emergentes. 

   Al suprimir el estado de bienestar los países europeos ahorrarán un tercio de sus gastos totales, incluidos los de defensa. Y al reducir los salarios aumentará la competitividad de sus precios, sus exportaciones y, consecuentemente, sus ganancias. Esta necesidad estructural del capitalismo europeo es lo que explica la presunta "traición" de la socialdemocracia, finalmente un partido patronal con antifaz progresista.

   Puesto que también han desaparecido los partidos comunistas, los trabajadores europeos se han quedado sin representación política, si se exceptúan algunas módicas izquierdas y movimientos incipientes del tipo de los "indignados" españoles. 

   Por ejemplo, cuando haya nuevamente elecciones nacionales en España, ¿a quién votará el ciudadano de a pie? Lo único que puede frenar la ejecución de este plan de las burguesías es una enorme movilización popular, pero eso no está a la vista, más allá de las previsibles huelgas de protesta, que los gobiernos pueden neutralizar sin mayores problemas. 

   Los casi seis millones de desocupados también son una palanca en manos del gobierno español, cuya economía muestra curiosos números en los últimos años. Desde 2009 las exportaciones crecieron 16 por ciento anual, y la productividad del trabajo aumentó cerca del 25 por ciento. Aquí ya se puede detectar una reducción del salario real del mismo porcentaje. 
   El euro es la llave que garantizará la continuidad de la crisis por varios años más (período necesario para completar el movimiento), porque en la práctica funciona como una convertibilidad. ¿Por qué Grecia, España, Italia, Portugal e Irlanda aceptan una moneda tan cara como el euro, cuya cotización respecto del dólar excede largamente las posibilidades de sus economías? Simplemente porque a sus respectivas burguesías les conviene (y porque es un atajo para alcanzar el objetivo).

   El plan de las burguesías cuenta con el apoyo del poder político, económico y mediático. Los trabajadores no tienen poder alguno y se ven obligados a vender su fuerza de trabajo (cuando logran hacerlo...) al precio que las patronales decidan pagarle.
    Así funciona el capitalismo, sólo que nos sorprende ver uno de sus rostros más desagradables en la vieja Europa, otrora aparente sinónimo de libertad, democracia y bienestar.

miércoles, 16 de enero de 2013

Cárteles Mexicanos: Economía, Violencia y Ruta de la Cocaína

 
    Al analizar los cárteles mexicanos, somos conscientes de que para entender sus acciones y sus interacciones, debemos reconocer que en el fondo son las empresas y no son organizaciones con motivos políticos. Esto significa que aunque la violencia inter e intra cárteles toma gran parte del centro de atención, un análisis cuidadoso de los carteles debe mirar más allá de la violencia hacia los factores económicos que impulsan sus intereses y sus finanzas.
Hay varios factores económicos diferenciados que tienen un profundo impacto en el comportamiento de cada cartel. Un ejemplo es el ciclo de cultivo y cosecha de la marihuana en la Sierra Madre Occidental. Otra es la industrialización de la producción de las metanfetaminas en México y el creciente conjunto de beneficios que ha proporcionado a los cárteles mexicanos en los últimos años. Pero cuando examinamos el comportamiento transnacional de los cárteles mexicanos, el factor más importante que influye en el comportamiento es sin lugar a dudas la economía del tráfico de cocaína.

La cadena de ganancias de la cocaína
La cocaína deriva de las hojas de la planta de coca, y tres países -Colombia, Perú y Bolivia- representan toda la coca cosechada en el mundo. Transformar la hoja de coca en clorhidrato de cocaína es un proceso relativamente sencillo de tres pasos. Una vez que las hojas de la planta de coca se cosechan, se convierte en lo que se conoce como pasta de coca. A partir de ahí, la pasta de coca se transforma en base de cocaína, que finalmente se convierte en clorhidrato de cocaína. El proceso implica varios productos químicos precursores: kerosene, ácido sulfúrico, carbonato de sodio, ácido clorhídrico, permanganato de potasio y acetona. La mayoría de estos productos químicos son fácilmente disponibles y fácilmente reemplazados o sustituidos, siendo muy difícil de regular por parte de las autoridades.
De acuerdo con cifras de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, los cultivadores de coca en Colombia reciben u$s 1,30 por cada kilogramo de hoja fresca de coca. En Perú y Bolivia, donde la hoja se seca al aire libre antes de ser vendida, los agricultores reciben u$s 3.00 por kilogramo.
En Colombia, por la hoja fresca utilizada en el procesamiento, se necesitan entre 450 y 600 kilogramos de hojas de coca para producir 1 kilogramo de cocaína base, dependiendo de la variedad de la planta de coca utilizada (algunas variedades tienen un contenido de alcaloide de cocaína superior). A u$s 1,30 por kilogramo, esto significa que cuesta entre u$s 585 y u$s 780 comprar la cantidad de hoja de coca necesaria para producir un kilo de base de cocaína. Un kilogramo de base de cocaína se puede convertir entonces en aproximadamente un kilogramo de clorhidrato de cocaína, lo que se conoce comúnmente como cocaína.
A medida que la cocaína transita desde el sitio de producción hasta los usuarios finales, aumenta de valor. De acuerdo con cifras proporcionadas por la Policía Nacional de Colombia, un kilogramo de cocaína se puede comprar por u$s 2.200 en las selvas del interior de Colombia y por entre u$s 5.500 y u$s 7.000 en los puertos colombianos. Pero el precio se incrementa considerablemente una vez que se sale de las áreas de producción y se transporta hasta cerca de los mercados de consumo.
En Centroamérica la cocaína se puede comprar por u$s 10.000 por kilogramo, y en el sur de México se vende por kilo a u$s 12.000. Una vez que pasa a través de México, un kilogramo de cocaína vale u$s 16.000 en las ciudades fronterizas del norte de México y oscilará entre los u$s 24.000 y u$s 27.000 al por mayor en las calles de Estados Unidos en función del lugar. Los precios son incluso más altos en Europa, donde se puede pagar desde u$s 53.000 a u$s 55.000 por kilogramo, y los precios de más de u$s 200.000 en Australia. Los precios al por menor por gramo de cocaína son también relativamente altos: un gramo cuesta aproximadamente u$s 100 - u$s 150 en Estados Unidos, u$s 130 - u$s 185 en Europa y u$s 250 - u$s 500 en Australia.
A lo largo de la cadena de suministro también hay un poco de "corte", que es cuando se le añaden sustancias a la cocaína para diluir la pureza y “estirar” el beneficio. Según la Policía Nacional de Colombia, la pureza de la cocaína que sale del país es de aproximadamente 85%. En el momento en que llega al Reino Unido, la pureza es del 60%, pero ha “derramado” más de un 30% a nivel minorista, según el Informe Mundial sobre Drogas 2012, de Naciones Unidas.

Comportamiento de los carteles
Se ha producido un próspero flujo bidireccional de contrabando de mercancías a través de la frontera México-Estados Unidos desde su creación. Los grupos mexicanos del crimen organizado se han involucrado en el contrabando de marihuana con destino al mercado estadounidense desde que el gobierno norteamericano comenzó a restringir el consumo de marihuana en el año 1900 y el crimen organizado mexicano se beneficiaron generosamente durante la era de la prohibición en los Estados Unidos.
Como la demanda de drogas ilícitas desde Estados Unidos aumentó en la segunda mitad del siglo 20, las organizaciones mexicanas se ramificaron para participar en el contrabando de otros tipos de drogas, incluidos los productos farmacéuticos y la heroína de alquitrán negro. El cultivo de amapola se introdujo a México en la década de 1930.
Estos sindicatos mexicanos del crimen organizado, tales como el cartel de Guadalajara, comenzaron a traficar cocaína a Estados Unidos a finales de 1970, pero durante muchos años las organizaciones mexicanas trabajaron como socios menores de los poderosos carteles colombianos de Medellín y Cali. México era una ruta secundaria de la cocaína en comparación con la vía principal que circulaba por el Caribe.
Como resultado, los colombianos embolsaron la mayor parte de los beneficios obtenidos de la cocaína traficada a través de México y los mexicanos percibían una comisión por cada kilo que transportaban. Sin embargo, no asumían ninguno de los riesgos de pérdida de los envíos que sucedían en el trayecto entre América del Sur y México.
A finales de 1970 y 1980 -la fase temprana de la participación de México en el comercio de la cocaína- algunos intermediarios estadounidenses como Juan Matta-Ballesteros también estaban muy involucrados en el flujo de cocaína a través de México. Movían cocaína desde Sudamérica a México, convirtiéndose en ricos y poderosos, como resultado de las ganancias que habían hecho.
Dado que los esfuerzos de interdicción de Estados Unidos, ayudados por la mejora de la vigilancia aérea y marítima, redujeron gran parte del flujo de cocaína por el Caribe en las décadas de 1980 y 1990, y como los gobiernos de Colombia y Estados Unidos desmantelaron los carteles colombianos, las rutas terrestres a través de Centroamérica y México se hicieron más importantes para el flujo de cocaína.
Es mucho más difícil detectar y confiscar contrabando que se mueve a través de la ajetreada frontera México-Estados Unidos de lo que era detectar contrabando que fluía a través del Caribe.
Este aumento de la importancia de México permitió a los carteles mexicanos ganar influencia en las negociaciones con sus socios centroamericanos y colombianos y asegurarse una mayor participación en las ganancias. En efecto, a mediados de la década de 1990 la creciente importancia de las organizaciones mexicanas en el flujo de cocaína hacia Estados Unidos permitió a los cárteles mexicanos convertirse en los socios principales de la relación comercial.
En la búsqueda de una porción aún mayor de la cadena de beneficios de la cocaína, los carteles mexicanos aumentaron sus actividades en América Central y América del Sur en las últimas dos décadas. Los mexicanos han expulsado a muchos de los intermediarios en América Central que transportaban cocaína desde Sudamérica a México para su venta a los carteles mexicanos. Sus esfuerzos por consolidar su control sobre el centro de las rutas de contrabando de América Central continúan en la actualidad.
Este cambio significó no sólo que los carteles mexicanos se hicieron cargo de las pérdidas sufridas por el transporte de cocaína desde Sudamérica a México, sino que también les permitió cosechar una parte creciente del lucro. En lugar de obtener un beneficio ajustado de tal vez u$s 1.000 o u$s 1.500 por kilogramo de cocaína ingresada de contrabando a Estados Unidos, los carteles mexicanos pueden ahora comprar un kilo de cocaína a u$s 2.200 o menos en América del Sur y venderlo por u$s 24.000 o más a sus socios en Estados Unidos.
Pero la expansión de los carteles mexicanos no se detuvo en Centroamérica. De acuerdo con las autoridades sureñas estadounidenses, los carteles mexicanos están cada vez más involucrados en el procesamiento de cocaína a partir de la hoja de coca en Colombia, Perú y Bolivia.
También hubo informes de incautaciones de pasta básica de cocaína contrabandeada a los laboratorios de procesamiento en Honduras y Guatemala. El uso de estos laboratorios de procesamiento centroamericanos, a cargo de los carteles mexicanos, parece ser una reacción a las iniciativas emprendidas por la Policía Nacional de Colombia para acabar con los laboratorios de cocaína y su disponibilidad de productos químicos de procesamiento de cocaína.
Los funcionarios estadounidenses antinarcóticos informan que hoy los cárteles mexicanos son los principales actores en el comercio mundial de cocaína y están constantemente trabajando para apoderarse de la parte de tráfico de cocaína que aún no está bajo su control.
Pero los esfuerzos de los carteles mexicanos por incrementar su participación en el negocio de la cocaína no se limitan al aspecto de la producción, sino que también han ampliado su participación en el contrabando de cocaína de Sudamérica hacia Europa y Australia y han establecido una presencia en África, Asia y los países europeos. Además, han intensificado sus actividades en lugares como la República Dominicana y Haití, en un intento por aumentar su participación en el contrabando de cocaína a través del Caribe hacia el mercado de Estados Unidos. Como se ve por las recientes operaciones lanzadas por la Policía de Estados Unidos, tales como la Operación Xcellerator, Chokehold o la Operation Imperial Emperor, los carteles mexicanos también han ido aumentando su presencia en los puntos de distribución dentro de Estados Unidos, como Chicago, Atlanta y Dallas, en un esfuerzo por aumentar su participación en la cadena de beneficios de la cocaína en el interior de Estados Unidos.
Mientras que las ventas de marihuana siempre han sido una importante fuente financiera para los carteles mexicanos, los grandes beneficios del comercio de la cocaína son los que han permitido a los carteles a ser tan poderosos como lo son hoy.
Los miles de millones de dólares de ganancias que se obtienen del tráfico de cocaína no sólo han motivado gran parte de la expansión global de los carteles mexicanos, sino que también la han financiado. Las ganancias de la cocaína permiten a los carteles mexicanos comprar barcos y aviones, contrabandistas y asesinos de alquiler ("sicarios") y sobornar a funcionarios del gobierno.
La cocaína es un producto que tiene un área de crecimiento muy limitada y específica. Por consiguiente, esta área de cultivo de coca y los corredores de transporte que se extienden entre la zona de producción y los mercados finales son muy importantes.
Con un modelo de negocio de venta de cocaína 10 veces superior al costo de adquisición -y aún mayor sobre el costo de producción- no es de extrañar que la competencia entre los diversos carteles mexicanos por la conquista de los corredores de contrabando a través de México hacia Estados Unidos llegue a ser muy agresiva. Scott Stewart


martes, 15 de enero de 2013

La economía en año electoral



Empezó el 2013 con fuerte debate político, especialmente en cuestiones económicas: la deuda, los trenes, la energía, la inflación, la inserción internacional y el tipo de cambio. Las elecciones de medio turno presidencial habilitan estas discusiones, anticipando el debate por la renovación presidencial del 2015 y el futuro mediato de la Argentina.

La deuda
Respecto del endeudamiento externo resalta en estos días la recuperación de la Fragata Libertad, embargada en Ghana por acreedores externos bautizados como fondos buitres.
La resolución favorable a la Argentina sirvió para realizar una manifestación de fuerza por parte del gobierno, con una movilización en la costa marplatense y afirmar el rumbo económico gubernamental, sin ahorrar críticas a sectores opositores, incluidos aquellos referentes del propio partido de gobierno con proyecto propio (Scioli o De la Sota).
Lo que muy poco se discute es cuales son a futuro las consecuencias de las demandas de los acreedores que no entraron al canje de la deuda, ni en 2005, ni en 2010, especialmente relativo a aquellos que tramitan la demanda judicial en EEUU y cuyo tratamiento se dirime hacia fines de febrero, con lo que puede ser un saldo de mayor deuda registrada en las cuentas nacionales del país, con mayor costo y por ende restringiendo recursos fiscales para necesidades sociales o alternativas de uso económico.

Ferrocarriles
El anuncio oficial remite a la compra de material rodante procedente de China e inversiones en infraestructura ferroviaria cercanas a los 5.000 millones de pesos para las mejoras de líneas ferroviarias, específicamente del Mitre y el Sarmiento. El ingreso de los vagones chinos se espera para el 2014, con lo que los resultados visibles apuntan hacia mediado plazo.
La discusión tiene diversas aristas e incluye el debate sobre el desastre de once en febrero pasado, con saldo de víctimas fatales y en proceso judicial, sin que aún se coloque en el banquillo del acusado al sistema de privatizaciones ferroviarias de los 90´ y mucho menos un nuevo proyecto de transporte público.
No solo se trata de recuperar la gestión ferroviaria o la intervención estatal en la mejora de infraestructura, sino discutir el papel del Estado en materia de transporte ferroviario, entre otras cuestiones relativas a la participación directa del Estado en la economía.
¿Es posible la reactivación de una industria local de material rodante asociada al restablecimiento de los talleres ferroviarios? El interrogante cuestiona las definiciones que asumen una industrialización de ensamble, para el armado de partes ingresadas del exterior, o una dinámica económica de compra de producción externa. En los anuncios realizados se trata de fabricación estatal china de vagones, diferenciando el papel del Estado productor e importador que asumen China y la Argentina respectivamente.
Claro que la objeción deviene de los recursos financieros para una operación productiva que recupere la capacidad de fabricar en la Argentina, algo que no puede disociarse del análisis del endeudamiento y el uso de los recursos financieros, fiscales y del superávit comercial.

Energía
Las importaciones energéticas continúan siendo uno de los principales déficit de la economía local, y la apuesta está realizada en la capacidad de la gestión estatal de YPF para obtener en el próximo trienio unos 37.000 millones de dólares para explotar los hidrocarburos no convencionales, cuya importancia anticipa el yacimiento de “vaca muerta”
Pero no solo se trata de capitales con disponibilidad de inversión, cuyos primeros anticipos aparecieron en los acuerdos con Chevron por 1.000 millones de dólares y en conversaciones con la petrolera China asociada a los Bulgheroni en Argentina, sino de la opinión de la sociedad relativa al uso de tecnología destructora del medio ambiente. En ese sentido se destaca la reciente decisión unánime asumida por el Concejo Deliberante de Cinco Saltos, la primera en ese sentido, para no permitir la técnica de la “fractura hidráulica” en la extracción de hidrocarburos, una tecnología imprescindible para extraer el shale-oil y el shale-gas.
El agradecimiento de Cristina Fernández a Hugo Chávez en Cuba se asocia a la cooperación solidaria venezolana en provisión de combustible y financiamiento en momentos en que el sistema mundial castigaba a la Argentina por la cesación de pagos. Quizá, junto al gesto de reconocimiento bien valdría involucrar a la Argentina en la propuesta de constituir Petroamérica, un proyecto de soberanía energética integrada del sur para hacer efectivo el “derecho de los pueblos a la energía”. Ello podría suponer la des-mercantilización de la producción y circulación de energía, a contramano de las negociaciones con las transnacionales que hoy encamina la YPF de gestión estatal luego de la expropiación parcial.

Inflación
El contraste del verano pasa por el éxito turístico y los límites del consumo de millones de personas con exiguos ingresos. Siendo generosos puede dividirse a la población en tres partes, en una de las cuales no impactan el incremento de los precios y puebla los centros de turismo, las rutas, la gastronomía y la hotelería en estos tiempos de vacaciones. Muy distinto ocurre en el tercio de menores ingresos, con dificultades serias para satisfacer necesidades alimentarias, de salud, educación o recreación, incluidas aquellas de orden vacacional. El tercio que media oscila entre las posibilidades del goce turístico y las limitaciones de los más necesitados.
Pero más allá de turismo y vacaciones, donde la Presidente pidió a los empresarios que “cuiden a los turistas”, en un mensaje a morigerar los precios, el tema afecta a las negociaciones salariales, que expresaron los conflictos de fines del 2012 y anticipaban la confrontación de los próximos días entre salarios y ganancias en tiempos de crisis, o de desaceleración económica vivida el pasado año.
El tema se dirimirá en la capacidad que tendrán empresarios y trabajadores para imponer sus precios, y en ese marco la política oficial, que por un lado remite a restringir la demanda de actualización salarial y a generar sujeto propio en los gremios empresarios y de trabajadores.
Hasta ahora fue infructuoso el camino de construir “burguesía afín”, menos aún desarrollar un agrupamiento empresarial que responda a los objetivos de la política económica y el “modelo”. Los empresarios y sus centrales apropian las ganancias pero retacean identificarse con un proyecto que no sienten como propio.
En el campo sindical, el gobierno también pretende un sindicalismo propio, dificultado últimamente por las aspiraciones de Hugo Moyano y la CGT. No termina de cuajar la estrategia disidente en las principales centrales sindicales, CGT y CTA, y pueden existir nuevas rondas de constitución de agrupamientos sindicales funcionales a la estrategia de visibilizar un sujeto proclive a sustentar entre los trabajadores el modelo.
El sujeto “económico”, empresario y trabajador ha sido y es la clave irresuelta para entender la iniciativa política gubernamental en esta década. Si algo promueve el kirchnerismo es iniciativa política para constituir sujeto político de apoyo a la gestión, medido con el éxito que supo pasar del 22% de consenso electoral al 54% entre 2003 y 2011.
Pero una cosa es el sujeto político para cualquier proyecto, un problema que también tienen las oposiciones, a derecha e izquierda del gobierno, y otra muy distinta es constituir un sujeto económico para la construcción consciente del “capitalismo nacional”, e incluso de una propuesta alternativa, anticapitalista o socialista.

Inserción internacional y tipo de cambio
El problema es el capitalismo su crisis actual y los desafíos para superarla, lo que supone discutir los rumbos para el desarrollo, capitalismo o socialismo en viejo y necesario lenguaje, como las sociedades necesarias para su materialización, en el G20 o con los vecinos en Nuestramérica, y dentro de ellos con quiénes y hacia dónde.
Argentina diversificó relaciones en la última década y hoy se verifica con el viaje presidencial a los Países Árabes, Indonesia o Vietnam, como antes a Azerbaiyán u otros países del continente africano. No hay dudas que la novedad en estos años es el creciente comercio y sociedad económica con China.
El problema es el rumbo civilizatorio que define la política de gobierno y con quienes se materializa el esfuerzo por un nuevo mundo. Ante la crisis capitalista, productiva, financiera, alimentaria, energética, monetaria, climática o medio ambiental, sistémica, o estructural, el interrogante pasa por la subordinación a las divisas y el sistema mundial o la habilitación de caminos de ruptura.
La ruptura supone la salida ya del CIADI y la denuncia de los tratados bilaterales de inversión, en el camino asumido por otros países vecinos. También implica nueva estrategia en materia de endeudamiento para realizar la demorada auditoria e investigación de la deuda y mientras suspender los pagos. Es un camino a transitar en conjunto con otros países y asociar la capacidad financiera de las reservas internacionales, las divisas, para usos alternativos y de transformación social, algo que facilitaría la lucha integrada contra la especulación financiera y el ataque a las monedas locales.
Uno de los problemas del país y la región es que hacer con las reservas, con la acumulación de divisas. Es decir, quien y para qué se usan. Si se ratifica un sistema que privilegia la acumulación de riquezas, ganancias y poder monopolista, lo que habilita la apetencia por el ahorro en divisas y la fuga de capitales para el caso argentino, o si se destinan esas reservas para un uso que encamine un proceso de transformación social con eje en satisfacer amplias necesidades populares. Julio Gambina, Profesor Universidad Nacional de Rosario.

miércoles, 9 de enero de 2013

Secretos en rojo, un libro para el debate


Escribe Héctor Solasso, destacado poeta y militante cordobés.

No es fácil abordar este libro, cuyo texto se desarrolla en varios planos, y en una gama de tonalidades que van desde los graves , el recuerdo emocionado y franco del autor de páginas de su vida, hasta los agudos, de definiciones polémicas, con las que se puede discrepar __ y de hecho, discrepo__ pero que crecen desde sus certezas y su honestidad.

Surge un primer interrogante, ¿por qué exhumar hoy, casi como en un acto de catarsis, secretos celosamente guardados en su momento, cuando han pasado veintiséis años de un Congreso partidario que inició la debacle, y más de veintidós años del hundimiento de la Unión Soviética, matriz y razón de ser de todos los PPCC del mundo?

Otra curiosidad, resulta del hecho de que, probablemente, el Partido Comunista Argentino haya sido, con mucho, la agrupación política que más libros publicó, que más imprentas y editoriales sostuvo, tanto en el país como en el extranjero, además de un vásto frente cultural e intelectual que llevaría a H.P.Agosti a escribir que "La sola existencia del Partido Comunista argentino, constituye en sí misma, un hecho cultural de primerísima magnitud".

Sin embargo, a partir de la crisis de los años ochenta, ningún dirigente, intelectual o cuadro político __a excepción, por lo que sé, de Fernando Nadra, Jorge Sigal e Isidoro Gilbert__ se atrevió o sintió la necesidad de expresar sus opiniones públicamente.

Quizás deba rastrearse esto en el desengaño, el desgarro, el quiebre de las certezas. Pero también en otras razones. Arturo Zamudio Barrios, en su libro "Las cárceles de Agosti" (Centro Editor), no se refiere a las prisiones físicas que el intelectual comunista padeció, sino a las limitaciones que las rejas del dogmatismo y el discurso único impusieron a su creatividad y solvencia. Y que afectaron igualmente a la mayoría de nosotros, porque dogmáticos, pro-soviéticos y stalinistas fuimos todos.

Claro, ahora es fácil descubrir otras lecturas, dudas que guardábamos, discrepancias que callamos. Tuvimos una historia de errores__ muchos de ellos trágicos__ y grandezas, de miserias y heroísmos, que, consciente o inconscientemente, todos conservamos en algún rincón de la memoria, porque nos formó (o deformó) marcando nuestras vidas.

Es en este sentido que "Secretos en rojo" es bienvenido, en un tiempo político que ha rescatado el debate, que revisa la historia. En este contexto, prácticamente todas las agrupaciones de izquierda han hecho su relectura a través de abundante bibliografía, no siempre lo suficientemente autocrítica  Cronicando períodos de la historia del PC, Alberto Nadra propone su aporte casi autobiográfico para cubrir este vacío. Sobre todo, en un punto que, paradójicamente, fue el detonante del "viraje" del 86 y sigue siendo leiv-motiv, por ignorancia o infamia: el rol del PC durante la dictadura militar, y en este aspecto, su testimonio veraz y documentado ofrece una visión esclarecedora sobre el divorcio entre una línea oficial errada y la práctica real de la militancia comunista, con el alto precio de miles de compañeros encarcelados y cientos de desaparecidos y asesinados.

No obstante, y desde el sincero reconocimiento de su mayor protagonismo, inserción partidaria y acceso a documentación, pero sobre todo, desde el respeto a su militancia y a su honestidad, me permito exponer mis discrepancias con enfoques que, más allá de lo anecdótico en el plano personal, comportan opiniones e interpretaciones políticas. Porque en algunos de esos enfoques, pareciera que hablamos de partidos e historias diferentes. De hecho, estuvimos en bandos opuestos, en una guerra sin gloria que enfrentó amigos, familiares, camaradas que creíamos entrañables, y que llevó finalmente a la virtual destrucción de un partido que supo ser grande y fuerte.

El compañero Nadra centra su crítica en el llamado "viraje en unidad", pero mantiene su defensa del "viraje", del cual se reconoce uno de sus promotores, hasta su renuncia en 1989. Para la mayoría de los comunistas cordobeses, fueron dos etapas del camino a la destrucción del Partido. Estuvimos de acuerdo con las Tesis y la necesaria autocrítica y corrección de los errores, pero siempre con la vista puesta en la construcción de un partido de masas, de su necesaria democratización interna y el acercamiento a los sectores más avanzados del peronismo, cuando el "viraje" proponía un partido elitista de cuadros, una "unidad de las izquierdas" que se traduciría en alianzas como el nonato Frente del Pueblo, el FRAL, Izquierda Unida , con el trotzkismo del MAS, desde un revolucionarismo tardío que alimentaría la mística acrítica del guevarismo. Hubo también una concepción del internacionalismo discutible, marcada por la diferencia entre la Brigada Gral. San Martín, que llevó su solidaridad activa a Chile, o la posterior ayuda prestada a los camaradas exliliados chilenos, acorde con las mejores tradiciones partidarias, y el aventurerismo irresponsable de enviar a un jóven cuadro, Marcelo Feito, a morir en la selva salvadoreña.

En ese momento, como Secretario de Propaganda, integraba el Secretariado del Comité Capital (Zona Centro). Ya desde 1984 comenzaron a detectarse algunos hechos extraños __porque no se trató de un debate fraternal, abierto, sino de una operación conspirativa solapada que contaba con el apoyo de algunos cuadros dirigentes__: como la incorporación de ex cuadros del ERP, que ya antes habían intentado esta maniobra "entrista" en el Partido Intransigente, y que tuvo su costo para la militancia alendista, distribuyendo __gracias a que no lográbamos unificar una posición contraria en el Secretariado__ la revista del movimiento Todos por la Patria y ocupando lugares subalternos. La juventud, mayoritariamente de extracción obrera, a pesar de la participación entusiasta de algunos de sus cuadros en la Brigada del café, comenzaría a ser suplantada por el sector universitario, para finalmente ser marginada y obligada a abandonar la Fede.

De 1985 hasta 1986 estuve en la Unión Soviética, pero recuerdo haber participado de dos asambleas provinciales con posiciones ya definidas y enfrentadas, la última de ellas, con la presencia de los "interventores" "Cacho" Álvarez y Domingo De Nápoli. Después, y hasta mi retiro en 1987, vino la "limpieza" del Partido. Decenas de cuadros, tanto en Capital como en el interior, compañeros firmes de toda su vida, que habían sufrido cárceles y torturas antes y durante la dictadura, fueron echados por "reformistas" y cubiertos de bajezas e infamias. A nivel nacional fueron miles, hombres y mujeres que habían entregado su vida a la militancia, privados como castigo de cualquier tipo de asignación, a una edad en que no podían "reintegrarse a la producción", eufemismo con que se designaba a las despromociones o "caídas en desgracia". Y todo esto sucedió entre 1987 y 1988, mucho antes de que los propios adalides del retorno al marxismo -leninismo se desmembraran en feróz interna. Y en este aspecto me véo obligado a señalar una limitación autocrítica del autor.

El Partido Comunista de Córdoba tenía una trayectoria de la cual estábamos y seguimos estando orgullosos. Desde el "Cordobazo" __que hoy toman como bandera sectores de ultraizquierda que en realidad tuvieron una participación mínima__, que no podría haberse realizado sin el acuerdo entre Tosco y Elpidio Torres, Secretario del SMATA (es decir, entre la izquierda y el peronismo) y sin el rol mediador de Jorge Canelles para convencer a Tosco, que se resistía a dicho acuerdo; hasta el "Navarrazo", cuando la Dirección pidió armas a Obregón Cano para defender el gobierno, quien se negó y prefirió viajar a Buenos Aires para solicitar la ayuda de Perón, que había aceptado calladamente el golpe y el posterior brutal asesinato del compañero Atilio López. Desde ser la única fuerza política en enfrentar abiertamente a Menéndez, García Rey, Lacabanne (Menéndez había amenazado con "no dejar un comunista vivo en Córdoba"), hasta una importante inserción sindical, con una respetable cantidad de delegados en los gremios más importantes, como Luz y Fuerza, docentes, bancarios y otros, y locales de intensa actividad en diversos barrios (zonas) de capital y provincia, además de un importante Frente Cultural que co-dirigía la SADE Filial Córdoba y las Direcciones de los gremios de la cultura (formados a nuestra iniciativa), Sociedad de Actores, de Artistas Plásticos y una política cultural respetada en todos los espacios políticos. De todo eso, no quedó nada, fue el desbande total. Hoy, muchos ex-comunistas compartimos con el PC (que no es ni la sombra de lo que fue el Partido) el apoyo al proyecto nacional y popular desde Nuevo Encuentro, en buena relación, aunque en lo personal, no deje de sospechar que su Dirección nacional, pese a haber corregido su línea y apoyar el proyecto nacional y popular, difícilmente pierda sus mañas opotunistas de cooptación y alternativismo.

Volviendo a cómo vivimos el "viraje", las primeras reacciones fueron extremas, incluso con propuestas de ocupar el local con camaradas armados, exteriorización de rabia que por suerte no prosperó (no obstante, los "interventores" tomaron la precaución, con un pretexto banal, de pedirle el arma a "Pepito" o "Miguelito", un siciliano bajito y de pocas palabras que custodiaba el local, antes de despedirlo). Así surgió la Tendencia Nacional Comunista, dispuesta a presentar batalla política, integrada por medio Comité Provincial, los camaradas de Tucumán, encabezados por su Secretario General, Alberto Kumpel, el Secretario del Partido y miembros de la Dirección de Salta, y en Buenos Aires Enrique Salvi, Antonio Caporale y otros. En la imprenta de un compañero ex-montonero editamos el periódico "Tendencia" que dirigí. Publicamos nuestras propias Tesis, constituímos una Dirección que tenía como Secretario General a Ricardo Clementi, acompañado por Miguel Contreras (h), Caporale, Kunkel y yo. A lo largo de más de un año, tuvimos conversaciones con Arévalo, los hermanos Iscaro (Normando participó en una importante asamblea nacional realizada en Capital), y muchos otros. Recuerdo un café que tomamos con Fernando Nadra, invitándolo a sumarse, pero él estaba convencido de que su batalla la tenía que librar desde adentro, aunque apoyaba nuestro esfuerzo. "Yo les voy a tirar una bomba...", dijo con entusiasmo. Se refería a su libro "La religión de los ateos". En fin, la carencia de medios y la falta de una estructura desarrollada, y, quizás, esa misma religiosidad que señalaba Fernando y que inhibía en muchos camaradas su voluntad de enfrentar sacrílegamente al Padre Eterno, pusieron fin a esta resistencia en los 90. Hoy reconocemos que fue un esfuerzo inútil, pero ayudó a muchos camaradas y a nosotros mismos, a no bajar los brazos. Seguimos trabajando en tratar de construir agrupaciones unitarias, participando en los organismos de Derechos Humanos, etc. De hecho, hasta el día de hoy, la mayoría de los ex-comunistas, de un modo u otro, continuamos militando en defensa del proyecto nacional y popular, y bregando, obviamente, por su profundización. 

Pienso que los jóvenes y no tan jóvenes protagonistas del "viraje", no procesaron correctamente el trauma que sufrimos todos, disparado por la contradicción entre una línea política vergonzosa que de hecho significaba una desviación oportunista de derecha (expuesta en documentos oficiales y particularmente en el inefable libro del Secretario General Arnedo Álvarez sobre el "convenio nacional democrático") y la militancia real que protagonizamos, durante la dictadura y ántes, contra el terrorismo parapolicial del 74 al 76. Los camaradas encarcelados recibían de sus familiares dos "informes" distintos, uno el real y otro el "virtual" del Comité Central. Al respecto, quizás deba rescatarse la postura de Rodolfo Ghioldi y de Agosti, voces solitarias que planteában llamar a la dictadura por su nombre, aunque es preciso reconocer que la resistencia en el contexto represivo, solo era posible encararla desde la defensa de los Derechos Humanos o lo politico-cultural, ya que haberlo hecho desde el apoyo a las organizaciones armadas, aparte de estar reñido con la realidad y nuestro pensamiento teórico y político, hubiese significado, lisa y llanamente, la liquidación del Partido.

Quizás de esa no resolución correcta del problema, en el caso del libro que comentamos, sin dudar en absoluto de su veracidad, surjan ciertos márgenes de exageración referidos al aparato militar, como la caracterización que hace Alberto del PC como una "organización político-militar", o Rodolfo, cuando escribe "ese aparato militar, en condiciones de dar batalla ejército contra ejército...". Efectivamente, el Partido siempre sostuvo los aparatos de autodefensa y el frente militar ( de lo que podemos dar fé, ya que uno de sus cuadros dirigentes en Córdoba, David Colman, sería secuestrado y asesinado en La Perla, junto a su compañera Eva, responsable de educación y su hija Marina, de 15 años, militante de la juventud), expresado, en nuestro caso, en las tareas asumidas de custodia del compañero Tosco y del local de Luz y Fuerza, su protección en la más rigurosa clandestinidad, su traslado a una clínica del Partido en Buenos Aires en su etapa final y el regreso de su cadáver a Córdoba para su despedida popular o el trabajo dirigido a sectores militares cercanos al Partido, operaciones estas de riesgo.

Más allá de esto, coincidimos en las críticas al aventurerismo, en la inexistencia de condiciones subjetivas reales, que "solo existieron en la imaginación de los dirigentes de precarias organizaciones armadas de entonces, muchos de los cuales aún siguen pontificando sobre los errores y haciendo un verdadero culto de lo que no fue. Lo que sí sucedió, y a ellos les cabe tremenda responsabilidad, es que llevaron a miles y miles de jóvenes y adultos a la muerte, que ejecutaron los militares asesinos y sus mentores y cómplices civiles". "Pero esa es otra historia", termina Rodolfo.

Si, una historia que amerita un debate, ya que puede hacerse extensiva esa responsabilidad a la teoría del "foco" y las derrotas del Che, como al propio error de los cubanos de querer exportar la revolución. Pero lo que podía justificarse en los 70 por un "clima de época", resultaba patético a finales de los 80, con el agravante de que se asumió una posición amañada frente a los hechos de La Tablada en 1989, "criticando a los compañeros equivocados" en lo que en realidad había sido una mesiánica acción provocadora que dañó seriamente a los organismos de DDHH y puso en riesgo a la democracia. En ese momento volvió a mi mente el hecho que mencioné antes, la revista Todos por la Patria difundiéndose en el local partidario.

Voy a omitir otros pasajes del libro (como las referencias al Che, el kirchnerismo o la crítica al keynesianismo, que merecen un debate que excede los marcos de este texto), recuerdos personales e imágenes íntimas ciertamente emocionantes. Pero hay uno que no puedo omitir, el que relata un hecho trágico que tuvo como protagonista, entre otros, a la compañera Leonor, de quién guardo (al igual que muchos de los viejos camaradas cercanos a mi) un afectuoso recuerdo. En esta historia, a cada uno le toca lo que le toca, y esa parte me emocionó profundamente. Yo había estado desde temprano en el local, en dos reuniones, una de ellas con Tita Hidalgo, que militaba en comercio, y salimos con una compañera a tomar un café al bar de la esquina. De pronto, la gente comenzó a pararse en la calle, que la policía ya había cortado. Desde la esquina, pudimos ver a los compañeros que eran tirados al interior de los celulares de la policía parapolicial. Rabia, impotencia, dolor. Luego, la movilización y la vigilia. Fué cuando la Dirección y los comunistas de Córdoba mostraron su estatura. Jorge Bergstein publicaría un folleto detallado y valioso, con las fotografías de los destrozos y las pintadas de la Triple A en las paredes. Agradezco el recuerdo, compañero, de ese pasaje de tu libro.

Quizás un exceso de anecdotario personal, valioso por cierto, restos de un rencor común que los años debiesen haber mutado en análisis político e histórico, no facilita el debate objetivo. Porque, ¿qué defendíamos o qué atacábamos en la disputa partidaria? La historia del "viejo" partido, merecía ser criticada, sus errores corregidos y superados. Una organización y una línea política no se sustenta o justifica en la mayor o menor heroicidad de su militancia. Pero toda la historia del PC y del movimiento comunista internacional, incluída la Unión Soviética, es una historia de errores y de aciertos, de grandes logros y de fracasos, atravesada por una línea ("una línea en la palma de la mano __diría Tuñón__ que separa la ceniza del fuego...") que marca la firme convicción en la lucha por derrotar al fascismo, la solidaridad internacionalista con la España Republicana, la epopeya del Ejército Rojo derrotando al nazismo, los movimientos partisanos de resistencia y, posteriormente, la ayuda soviética a todos los movimientos de liberación nacional, invalorable en el caso de la Revolución Cubana. Inmersa conscientemente en esa historia (curiosamente olvidada por "el Partido del XVI Congreso") transcurrió nuestra vida y nuestra militancia.

Y hasta se podría decir que sigue transcurriendo, como "Aquello donde quedó fijada, perturbada por lo que parece ser un duelo que nunca terminó y a lo que vuelvo obsesivamente, es el relato de lo que fue una esperanza y terminó en fracaso...", como sentidamente expresa esa gran escritora y compañera, Liria Evangelista.

Por eso, la crítica en bloque, descontextualizada, está más cerca de la autojustificación del desengaño que de una relectura lúcida desde la izquierda. Sigo creyendo que la Unión Soviética marcó la historia del siglo XX, y que su hundimiento puede interpretarse como una verdadera tragedia histórica, al decir de Eric Hobsbawm. Curioso destino el de los comunistas, de desgarro en desgarro. Cuando muere Stalin, millones de hombres y mujeres de todo el mundo lloraron. Cuando el XX Congreso del PCUS, millones de comunistas nos sentimos desconcertados, estafados. Cuando los tanques soviéticos entraron en Hungría para aplastar una contrarevolución fascista ("la batalla que perdió la reacción", como escribió Fernando Nadra) creímos (y sigo creyendo) que fue correcto. Cuando sucedió lo de Checoslovaquia, pensé y sigo pensando que se frustró la última posibilidad de una reforma democrática del socialismo.

Después, hechos como el cisma chino-soviético, Vietnam invadiendo Camboya para reprimir a "comunistas" genocidas, China atacando a Vietnam, para finalizar en el Vietnam soviético en Afganistan, fueron horadando el relato heroico. Y sin embargo, ese relato y esa realidad existieron, e indirectamente, somos sus herederos y también corresponsables de su fracaso.

Hoy, "militantes entre dos siglos", estamos pisando una nueva época. La Unión Soviética, que fue capaz de la epopeya de derrotar al nazismo, implosionaría sin resistencia, sin disparar un solo tiro. Los partidos comunistas de masas de occidente terminaron reducidos a su mínima expresión, y la caducidad de la hipótesis revolucionaria, al menos en los capitalismos desarrollados, es un dato objetivo de difícil refutación. Es que el derrumbe de muchos paradigmas, no es un invento de la posmodernidad, sino el resultado de un cambio de época que merece una lectura desde el marxismo, que reclama a su vez, una relectura que lo exima de determinismos teleológicos e influencias positivistas, rescatando y actualizando su riqueza en plenitud, desdogmatizada.

Si somos capaces de construir nuevos paradigmas, nuestros sacrificios, sueños y desgarros, no habrán sido vanos  "Hay cosas peores que tener una religión, por ejemplo, carecer de una visión organizada del mundo", como dice Ludolfo Paramio. Pienso en un socialismo factible, democrático, realizable, que no imponga al pueblo un destino sacrificial en aras de un futuro incierto, como ocurrió con todas sus frustradas expresiones. Es el camino que están mostrando los procesos latinoamericanos, con mayor o menor grado de profundización según sus contextos históricos nacionales y las respectivas correlaciones de fuerzas.

¿Los ex-comunistas? Ciertamente constituimos el partido más grande del mundo. No renunciamos a nuestra historia, incluso muchos no renunciamos a seguir considerándonos comunistas. Pero más allá de la lícita nostalgia, diario de a bordo de nuestras vidas, nuestras convicciones adquirirán vigencia en la medida de que seamos capaces de ejercer una crítica y autocrítica objetiva y honesta, que no nos empantane en teoricismos esquemáticos y consignismos vacíos  muchos de ellos perimidos, sino que nos permita acceder a una apreciación correcta de una nueva realidad nacional, latinoamericana y mundial, y contribuir con nuestra experiencia, a consolidar y avanzar en los nuevos caminos que, dificultosamente, con avances y retrocesos, con incertidumbres y certezas, vienen, venimos desbrozando los pueblos de nuestro continente.

No dudo que en este camino, compañero, marchamos juntos  más allá de interpretaciones del pasado o del presente. Si "Secretos en rojo" merece ser valorizado, es precisamente porque, por sobre las posibles y lógicas visiones diferentes, propias del debate político, expone con valentía y honestidad, una vida de admirable militancia que debe enorgullecer al "clan de los Nadra" (ya aclaré en un primer comentario las diferencias de valoración que tuvo este rótulo), y que nos enorgullece a todos los que supimos recorrer esos tramos de la historia.

lunes, 7 de enero de 2013

¡Basta con (no de) Riquelme!


Realmente como hincha de Boca siento con dolor que lo que sabía un sueño imposible no se concretara, como era previsible por los intereses en juego, y Juan Román Riquelme no nos deleite más a los xeneizes que vemos en ese  tipo de jugadores y hombres lo que nos gusta del fútbol: el contenedor ofensivo, que pisa la pelota, pisa el césped y ordena la cancha, que lo extrañará, pero ya no lo verá acariciarla con su paso.

Nadie tiene por qué compartir ni mi bandería ni mi opinión futbolística, pero reclamo un poco de coherencia para quienes denunciamos diariamente el macrismo depredador y la manipulación mediáticas, dentro de los cuales algunos no alcanzan a percibir que se están masticando y digiriendo en el terreno futbolístico –que también es político— el mismo veneno que critican/amos.

Siempre fue igual, y que alguien me lo desmienta: siempre es una fuente no identificada, un paseador de perros o un paracaidista húngaro el que dice que Riquelme dice las barbaridades que hemos escuchado durante años: internas, malestar, “conspiración” contra tal o cual jugador. ¿Alguien tiene una declaración publicada o grabada de Román contra Martín Palermo, parar tomar un ejemplo paradigmático de las crónicas, perdón carroña gráfica y audiovisual de toda una década? Y luego, cuando a él se le antojó, no a las corporaciones mediáticas, dar su palabra, y en ellas nunca una palabra contra un compañero, en todo caso solidaridad y acompañamiento.

¿Saben que pasa amigos y compañeros?

Pasa  que Riquelme, como en su momento Bianchi, enfrentó el poder absoluto de Mauricio Macri en el club, no le aceptó su trato  patronal, sino que le fue de igual a igual sin pedir la ayuda de ningún medio, solo con su talento y el cariño de la hinchada. Y el patrón del club perdió. Y la patronal no perdona.

Pasa que Riquelme se negó sistemáticamente al juego de las grandes corporaciones de medios de tenerlo “en exclusiva”, de pagarle por cada declaración exclusiva, y eventualmente explosiva, y a su vez apoyarlo en las pulseadas con las directivas, o inflarlo para las negociaciones de los pases. Y eso la patronal, y sus “esquiroles”, los cronistas y comentaristas que cobran por más de una ventanilla tampoco se lo perdonaron.

La misma información para todos y a todos, en el mismo período de tiempo, sin cobrar ni pagar. Inaudito e inaceptable. Ni “El Diego” se salvó de esta, por necesidad o por revancha, y aparecen irreverentes como el Diego en el horizonte del futbol profesional.

No pretendo historiar, simplemente decir que esta semana le inventaron, sí, le inventaron a Riquelme todo tipo de planteos que negó (cuando él decidió hablar), definición que el mismo Bianchi, junto con los hinchas los únicos dolidos por la ya anticipada decisión de JR, avaló. Además de manipular groseramente, generando clima adverso hasta en los que lo quieren, con la “novela de Riquelme”, novela que EL nunca siquiera esbozó, nos vendieron que para volver “exige” extensión del contrato, luego “dólar blue”, y el mismo sábado –horas antes de que confirmara su partida, el matutino más querido por la militancia titulaba en tapa, e “informaba”, sin ninguna fuente, salvo una cobarde referencia a “la dirigencia”, asegura que ésta valerosa pléyade de desinteresados luchadores por los colores del club “le contestaron que no (al dólar blue) y ofrecieron un año más de contrato si gana la copa y juega el 80% de los partidos”. Si claro, si ese medio miente, pero no es el único, muchachos.

Un desconocido periodista de Clarín, Enrique Gastañaga, recibió vía libre para una nota que habrá soñado ilevantable, definitiva para JR. Con la panza medio llena ya de su gloria, el escriba tituló “10 preguntas que Román seguro le hizo a Riquelme”. En realidad fue definitiva, pero para él, que por vergüenza no debería firmar por varios años.

Gloso en minúscula al empleado, omitiendo comienzo y final (para no ensañarme, y abrumar con su pretenciosa y hueca  pluma, pero pueden leerse en la edición del 5/1/2013, Pág. 65) y respondo yo, Alberto Nadra, a mi nombre,  y no el de Riquelme, al que no conozco personalmente:

1) ¿Dejás de ser un hombre de palabra al regresar a Boca luego de cansarte de repetir: “Como jugador no vuelvo”? NO DEJÓ DE SER UN HOMBRE DE PALABRA.
2) ¿Por qué te sentías “vacío” nada menos que antes de la segunda final de una Copa Libertadores, hace apenas 6 meses, y ahora estás tan “lleno” que pedís primero la extensión de tu contrato hasta fines de 2015 y luego que te eleven el tope del dólar? NO ESTABA ‘LLENO’ Y NO PIDIÓ NINGUNA DE LAS DOS COSAS.
3) ¿Por qué te sentaste a negociar con el presidente que, según tus dichos, no te quería en la Bombonera? NO NEGOCIO CON LA PATRONAL MACRISTA: HABLÓ POR RESPETO A BIANCHI.
4) ¿Cómo aceptás convivir con un presidente que, según declaraste, permite que la barra controle las tribunas y, por ejemplo, impida a otros hinchas colocar banderas apoyándote? SIMPLE, NO ACEPTÁNDOLO.
5) ¿Cómo mirarás a la cara a Paredes, ese chico al que marcaste como tu sucesor y cuyo crecimiento no querías tapar? DE FRENTE LO MIRA GASTAGÑÁ, ALGO QUE VOS JAMÁS PODRÁS HACER CON ROMÁN.
6) ¿Qué pensarán de vos los compañeros que aún siguen en Boca y compartieron esa final perdida con Corinthians que jugaste sabiendo que te irías? LO QUE SIEMPRE PENSARON, Y CON MAYOR RAZÓN, PESE AL DOLOR.
7) ¿Cómo negás que te fuiste hace seis meses por Falcioni? NO NEGÒ NI TIENE QUE NEGAR NADA.
8) ¿Cómo desmentís que la cadena nacional previa a Godoy Cruz no fue para impedir la renovación de Falcioni? ESA PREGUNTA, DON ESCRIBA, ES PARA LOS HINCHAS QUE HICIERON LA CADENA NACIONAL NO PARA ROMÁN.
9) ¿Podrás, a los 34 años y tras 6 meses sin jugar, darle al equipo lo que espera de vos? NUNCA LO SABREMOS. ESA PREGUNTA TE LA HICISTE SOLO.
10) ¿Tenés ganas reales de retornar o tus pedidos son para que Boca te diga que no? NO HUBO PEDIDOS Y HACE TIEMPIO QUE LA DIRIGENCIA DE BOCA, NO BOCA, DIJO QUE NO.

¿Qué hacés ahora con tus "tremendas" diez preguntas Gastagña? ¿Dónde meterlas?

Te las responde EL VIRREY, Carlitos Bianchi, el recuperado técnico de Boca:

“Román es libre y tiene derecho de hacer lo que él desea. Lógicamente a mi me hubiera gustado contar con él. Quién no quiere tener a Riquelme en su equipo, es uno de los mejores, o el mejor jugador que actúa en el fútbol argentino, pero respetó la decisión que tomó. El nunca me había prometido que iba a volver a Boca”.
En una sociedad que se vende por cualquier cosa y no le da valor a la palabra, Riquelme, a pesar de todas las ganas que tiene de jugar al fútbol, respetó su palabra. El había dicho una frase que lo condicionó y tomó una decisión lógica. Cada día lo respeto más”.