lunes, 29 de octubre de 2012

La Nación: cátedra de manipulación


El diario La Nación de ayer domingo  con la firma de Martín Kanenguiser  publica una nota crítica que titula “La Argentina aumentó casi  70% sus negocios con gobiernos autoritarios”.
Lo llamativo  es que el informe sobre el cual el periodista fundamenta su opinión, contiene datos  realmente  buenos para el país. Expresa que el promedio general del aumento de las ventas Argentina fue del 50%, con el agregado que con relación a algunos países el crecimiento fue aún superior, alcanzando el 66%.
Es decir, en un mundo en crisis y convulsionado el informe es realmente positiva y  debe ser motivo de orgullo para todos por ser el resultado alcanzado por el esfuerzo de nuestros trabajadores y empresarios.
Pero lamentablemente  para quien escribe la nota no es así.
Su deseo en querer mostrar un país aislado no tiene límites. Se coloca en una posición que a cualquier analista lo conduce a deducir que hay dos alternativas:  lo enceguece el odio, o  es tan fuerte su compromiso con los intereses foráneos,  que realmente se molesta por la porción de mercado que Argentina logra en países donde supone que deberían hacer negocios solo las economías centrales.
Y qué es lo que “escandaliza” a quien escribe la nota? , la circunstancia que  las ventas realizadas a países que el periodista define con gobiernos autoritarios o dictaduras,  crecieron el 66%, es decir un 16% por sobre el promedio general de incremento del 50%.
Centra su crítica en el aumento de las ventas con destino a China,  Arabia Saudita, Egipto, Vietnam,  Irán, Turquía y Argelia, a los que cataloga como dictaduras o con gobiernos autoritarios y que,  al parecer para el periodista,  no merecedores de que Argentina se esfuerce en incrementar las relaciones comerciales. Las ventas  hacia esos destinos pasaron de 12.245 M  a 20.330 M de dólares.
En otro pasaje de la nota menciona con el mismo tufillo crítico el aumento de nuestras ventas con destino a Venezuela, Marruecos e India.
Pretende demostrar con esto que estamos aislados del mundo.
Le duele que Argentina haya sido exitosa en su política comercial.
No tolera que nuestras ventas al mundo hayan aumentado en promedio el 50%. Y mucho más insoportable le resulta  que hayamos sido capaces de crecer no solo en los mercados tradicionales, sino además en aquellos que no lo eran para nuestro país.
En su afán de criticar por ejemplo no dice:
Que  Alemania es el tercer socio comercial de Irán y que su intercambio comercial con China  este año llegará a los 200.000 millones de dólares.
Que el principal socio comercial de Arabia Saudita es Japón hacia donde destina el 30% de sus exportaciones;
Que el intercambio comercial de Estados Unidos con Turquía en el 2010 superó los 21.000 millones y que su mercado interno es el principal destino del petróleo venezolano;
Que el comercio bilateral entre Italia y Egipto  en 2010 alcanzó  los 7.200 millones;
Con respecto a Argelia el 24%  de sus importaciones provienen de Francia y el 20% de sus exportaciones  van a Italia;
Los principales clientes y proveedores de Marruecos son España y Francia. El comercio de Marruecos  con España  alcanza los 6.500 millones  de dólares;
El comercio bilateral entre Italia y Egipto en 2010 fue de más de 7.200 millones;
Que el principal socio de Irán en nuestra región es Brasil  y que incluso Estados unidos comercializa con ellos;
El ánimo destructivo los conduce a no detener su crítica ni siquiera ante los hechos  positivos que como país logramos.
Es lamentable.
En fin… es la tónica del discurso que hoy sostiene la oposición dentro de nuestro sistema político.
Es con este discurso con que quieren mostrarse como instancia superadora y dar respuesta a los problemas aún pendientes de solución. Eduardo Román Di Cola, Diputado Nacional (Mandato Cumplido-MC)                                  

martes, 16 de octubre de 2012

A 50 años, Silvio y "Mi crisis de octubre"

 Ineludible recuerdo (y foto) de Silvio Rodríguez, a 50 años de "La crisis de los misiles", cuando Estados Unidos estuvo a punto de atacar nuclearmente a la Revolución, y tal vez --algo de lo que se dice poco-- desatar la extinción del género humano.

He vivido días magníficos y sentí a tu lado el orgullo de pertenecer a nuestro pueblo en los días luminosos y tristes de la Crisis del Caribe.
--Carta de despedida del Che a Fidel, 1965.

En octubre de 1962 ya yo llevaba más de un año en las milicias. Me había inscrito en mi escuela secundaria, en 1961, cuando la invasión por Playa Girón. Por eso pasé aquella famosa crisis acuartelado en mi centro de trabajo, haciendo guardias de madrugada con un máuser.
El semanario Mella y sus talleres quedaban en la calle Desagüe 108 y 110. Durante el día trabajábamos como el órgano de prensa que éramos. A eso de las 5 de la tarde íbamos a bañarnos y a comer a nuestras casas. A las 8 de la noche nos íbamos caminando hasta el Pontón, frente al parque de la antigua Escuela Normal de La Habana, a hacer preparación combativa. Después regresábamos al Mella, a dormir.
Nuestras prácticas militares eran bastante aburridas y a casi nadie le gustaban. Nos habían prometido clases de tiro, que nunca aparecieron, y todo consistía en marchar y arrastraros por el fango del centro deportivo, mientras los tenientes de milicia nos gritaban que bajáramos cabeza y talones, y nosotros tratábamos de imaginar que librábamos algún heroico combate.
Una madrugada, cuando todo el Mella dormía, Carlos Quintela y otros de la dirección del Semanario nos pusieron de pie para contarnos que habían estado con Fidel. La noticia era que a la mañana siguiente el primer barco ruso llegaría a la zona de bloqueo que Kennedy y MacNamara habían decretado en torno a Cuba. Recuerdo que Quintela, con ojos soñadores, decía: “¡Quién estuviera en ese barco!”, seguro suponiendo que les iba a tocar la histórica misión de seguir adelante y ser hundidos.
La orden del alto mando norteamericano era inspeccionar la carga de cuanta nave se acercara a Cuba, para impedir que nos llegaran armas. Fidel había reiterado aquella noche que quien quisiera inspeccionar nuestro territorio tendría que hacerlo en zafarrancho de combate, un principio que todos los cubanos teníamos muy claro.
La suerte de aquel barco, que acabó dando media vuelta y regresando a la URSS, la vine a conocer mucho después, porque aquel pormenor, en los días posteriores, no fue tratado con mucha claridad por nuestra prensa. Era demasiada la humillación a que las dos superpotencias sometieron a Cuba --lo que sin duda nos sirvió para saber el verdadero calibre de nuestras amistades y lo solos que estábamos frente al poder destructor de nuestros enemigos.
Una noche en que me tocó la peor guardia, la de 2 a 4, creo que el mismo día en que por la provincia de Oriente se derribó un U-2, volvió a llegar Quintela de madrugada, ahora diciendo que al amanecer se esperaba un ataque nuclear. Querían partir la isla en tres pedazos, de modo que corriera mar entre ellos, para después realizar un triple desembarco de marines. La recomendación que nos daban era que no miráramos al este, a eso de las seis de la mañana.
Después de aquella conversa en la puerta del Mella, nuestros responsables subieron a sus oficinas y yo me quedé solo allá abajo, pensando en la utilidad del máuser que tenía en las manos, mirando a la luna llena con la intensidad de mis casi 16 años, sintiéndome una especie de hombre lobo que sólo pensaba en su familia. En lontananza (calculé que por Carlos III), escuché pasar una conga cantando “Si vienen, quedan”...
El relevo llegó un poquito tarde, como era habitual en aquella jodida guardia a mitad de la noche. Lentamente subí las escaleras, seguido por un cachorro del barrio que teníamos como mascota, y una vez arriba me hundí en una de las hamacas. Pensando en lo mucho en que tenía que pensar, me quedé dormido.
La mañana siguiente, el trajín cotidiano. Del ataque atómico me vine acordar varios días después.
Y casi diez años más tarde, escribí esta canción:

Oh, bienvenido seas, octubre

Octubre.
Octubre había llegado como llega siempre,
mojando la acera de lluvia delgada y paciente.
Cargando de sombra a las nubes que llevaban prisa,
poniéndole un tono salobre al sabor de la brisa.

Octubre terrible del sesenta y dos,
llegaste derecho a parar el reloj
y no reparaste en que en esta región
tutear a la muerte era ya tradición.

…Y octubre se marchó
por donde mismo entró.

Fueron los tiempos duros para el amor,
fueron  tiempos de estrellas y soledad.
Como un adolescente que abandona la casa paternal
y descubre que tiene todo el poder de su verdad.

Fueron los tiempos duros de la amistad
y aprenderlo bien caro nos costó.
Pero mucho aprendemos aún hoy por hoy
cuando resbala algún antifaz
que deja ver el rostro de la ambición.

Octubre
de nuevo nos muestra su rostro de cuarto menguante,
pero en esta fecha se siente un calor sofocante.
Se siente que se ha envejecido destruyendo mitos,
cambiando mil nuevos ciclones por nuevos amigos.

Ahorita llegamos al setenta y dos
y cumple diez años aquella lección
que se une a mil nuevas carencias de dios
que a veces dan risa y a veces dan tos.

Oh, bienvenidos seas,
octubre de mi amor.

sábado, 13 de octubre de 2012

Venezuela y Nuestramérica

El triunfo electoral de Hugo Chávez en las recientes elecciones presidenciales en Venezuela habilita un debate sobre los cambios económicos, su rumbo y sus beneficiarios.
Quedó muy claro en la campaña electoral y en el balance del resultado, las opiniones favorables al rumbo de la revolución bolivariana y sus críticas, incluso más allá de Venezuela. Casi podemos mencionar al episodio como un acontecimiento mundial. No daba lo mismo para unos y para otros el resultado.
La derrota del chavismo hubiese representado una esperanza para las clases dominantes locales, regionales y mundiales para reencauzar a Venezuela y su petróleo en la lógica de acumulación y de dominación imperialista. Enfatizo en ello porque aún vendiendo petróleo a EEUU en grandes cantidades, el régimen actual de Caracas no se subordina a la lógica de dominación global de EEUU, más bien la confronta.
Por el contrario, el triunfo bolivariano otorga nuevos aires al rumbo por los cambios en la región. El pasado 12 de octubre, Evo Morales, presidente del Estado Plurinacional de Bolivia, denunciando aquel 12 de octubre de 1492 trajo a cuento la realidad del presente y señaló que hoy “tener relaciones con la Embajada de Estados Unidos es como una caca”. La réplica del poder mundial no se hizo esperar, adentro y afuera de Bolivia.
Del cambio político al cambio económico
Es que Nuestramérica en proceso de “cambio político” necesita, además de consolidarlo (en el sentido que afirman estas elecciones venezolanas), avanzar en el “cambio económico”, sea el Socialismo del Siglo XXI propuesto por Venezuela, o el Socialismo Comunitario sustentado desde Bolivia.
No se trata solo de decisiones nacionales de esos países, sino de la capacidad de la región por liquidar la herencia neoliberal de la institucionalidad gestada en los años 80 y 90. Claro que algunos imaginan que se puede criticar y enfrentar al neoliberalismo desde el capitalismo. Es parte de las ilusiones que sostienen la independencia dentro del capitalismo.
Tanto Venezuela como Bolivia se proponen el tránsito del capitalismo al socialismo, cada uno con sus adjetivos, que reportan a su historia y tradiciones, pero coincidentes en el rumbo de la transición al socialismo.
Ello supone desarmar los vínculos estructurales del orden social vigente, al interior de los países y en el vínculo con el resto, lo que impacta en el proceso de integración regional.
Recientemente Ecuador ha sido demandado por el CIADI a cumplir con una sentencia ante la demanda de una transnacional. Una cosa será la lucha solitaria desde el Ecuador ante el CIADI, o la activa solidaridad de los países de la región.
Tanto Bolivia, Venezuela, como Ecuador se retiraron del CIADI, además, Brasil nunca firmó el protocolo de adhesión, con lo que surge el interrogante sobre la legitimidad que le otorgan a ese ámbito de la dominación otros países, los que continúan subordinados a la lógica de defensa de las transnacionales que opera en el CIADI y su mentor el Banco Mundial.
Se trata de organizar la transición en dos carriles simultáneos, el nacional y el regional, como forma de discutir y disputar desde la región el orden mundial.
A nivel nacional se precisa desarticular el poder de las transnacionales, orgánicamente articuladas con el poder económico local, sea el tradicional oligárquico, como el burgués moderno, o el especulativo.
Es curioso, por ejemplo para el caso argentino el fortalecimiento del sector bancario, con excedentes que lo alejan de la crisis del 2001 y lo proyectan en el presente como uno de los emprendimientos con mayor rentabilidad. ¿De dónde sale esa renta? ¿No estará asociado al usurario margen entre tasas pasivas y activas, cuantiosos costos de los servicios a usuarios del sistema bancario?
En rigor, solo responde a la lógica de la ganancia en el capitalismo, y la creciente bancarización más que favorecer al usuario del servicio financiero es una forma de extensión del negocio bancario.
Convengamos que transitar el cambio económico supone enfrentarse con el poder local y mundial. No es ni será sencillo enfrentar a ese poder, pero la primera decisión es asumir el costo del enfrentamiento, lo que requiere generar en consenso social para las transformaciones. Hace falta construir un sujeto económico para esa tarea, y la autoconciencia de ese sujeto para la transición.
Aprender de las experiencias
La experiencia boliviana puede ayudar en la región. Su concepción constitucional de economía plural evidencia la presencia de distintas formas de organizar la economía, vía empresa privada capitalista, pública estatal, comunitaria y social cooperativa; pudiendo encarar procesos mixtos.
La hegemonía actual en la economía boliviana es la capitalista, pero el análisis de los presupuestos públicos de los últimos años, en la gestión de Evo Morales, da cuenta de una tendencia al crecimiento del sector estatal, incursionando en la creación y el fortalecimiento de empresas públicas. Es cierto que no siempre con los mejores resultados, pero puede contarse a favor del proceso boliviano la escasa tradición del Estado en la estructuración de empresas productivas o de servicios.
El objetivo explicitado por el gobierno plurinacional es modificar la hegemonía en la economía plural, lo que supone aplicar políticas favorables al desarrollos del sector estatal, del comunitario y del social cooperativo, desestimulando la lógica de privilegio al sector capitalista.
Un problema en Bolivia, tal como en otros países de la región, es la tentación de una inserción internacional mediante la venta de recursos naturales. En la agenda patriótica formulada por el presidente boliviano en agosto pasado se enfatiza en la necesidad de superar la primarización de la economía, vía industrialización de los recursos naturales[1].
Esa agenda se complementa con la superación de la extrema pobreza, la seguridad alimentaria con soberanía, la satisfacción universal de los servicios sociales para el conjunto de la población, y el desarrollo tecnológico, imprescindible para el proceso de emancipación.
La disputa es grande en ese proceso y el propio sector empresarial hegemónico demanda ser parte de la discusión de la agenda sustentada hacia el 2025, el año del bicentenario de Bolivia.[2]
Toda la región debe estudiar los procesos de cambio, especialmente aquellos con mayor disposición a confrontar con las hegemónicas relaciones sociales de producción capitalistas.
Lo definitorio es el sujeto económico
Ello supone el desafío por construir sujeto, por el socialismo comunitario en Bolivia, y con la especificidad que suponga cada construcción nacional, pero completando el acumulado en sujeto político popular con sujetos actuando en el proceso económico, y especialmente productivo. En el caso boliviano son los indígenas, originarios y campesinos, los trabajadores, los cooperativistas, los micro y pequeños, medianos y grandes empresarios asociados al proyecto transformador.
Tal como hemos sugerido en varias ocasiones, e insistiremos hasta el cansancio, las preguntas que se nos imponen para la transición apuntan a responder: ¿Qué, quién, cómo, y para quién producir?
Ese es el debate en Nuestramérica, en un mundo en crisis, cuando el FMI acaba de publicar sus perspectivas económicas para el 2013[3], rebajando las proyecciones del 2012 y del 2013 “de 3,2 por ciento en 2012 para ALC
(un 0,6 por ciento por debajo de lo proyectado en abril) y de 4 por ciento en 2013”. En el informe mundial se muestran tendencias de menor crecimiento para EEUU, Japón y especialmente Europa.
¿Tiene que continuar nuestra región produciendo para ese mundo capitalista en crisis, o generar las condiciones para una ruptura en el plano de la economía y la producción?
Así como afirmamos la necesidad del cambio político al económico, esa orientación también debe constituir el desafío de la integración. Es muy destacable el avance de Unasur y Celac, pero están desafiados en la actualidad a constituirse en mecanismos de articulación productiva para contribuir a la transición de la hegemonía capitalista hacia un nuevo orden.
Claro que hay que ser conscientes que en la región anidan proyectos diferenciados, incluso contradictorios. Por eso enfatizamos en la importancia del triunfo democrático para un nuevo periodo de gobierno de Hugo Chávez y su proyecto de revolución bolivariana por el socialismo (Julio Gambina)

jueves, 4 de octubre de 2012

Ella, los guerreros y después...

 Imperdible nota --poniendole historia, humanidad e ironía a la paradoja de la batalla cotidiana en nuestra profesión-- de Armando Vidal, decano del los periodistas paralmentarios, gran pluma y mejor amigo, con quien la vida nos juntó, uniendo culturas tan diferentes.

Estuvieron juntos y ahora están separados, lucharon sin divisiones contra dictaduras y a casi treinta años de democracia, entre aciertos y errores del Gobierno y campañas de los medios, están en bandos enfrentados. Son los periodistas políticos veteranos, gente de talento y pelea.

   El interesante debate entre periodistas políticos con historia, cuyo eje es el gobierno de Cristina, crece día a día por ser una gestión más peronista que la de Néstor y porque ella parece complacerse en dar de comer a las fieras. Cuando estaba enojado, Perón, desde el balcón, hacía  lo mismo..

   Periodistas como Jorge Lanata o los jóvenes de Clarín, Página /12 o Tiempo Argentino, por citar algunos, son una parte diferenciada de la misma pelea pero en otra categoría. Ellos son las plumas de la democracia, los nacidos al oficio después del 83, a diferencia de esos veteranos de mil batallas, dichas en un sentido figurado y, en algunos casos, en el otro sentido, también.

   No vamos hacer nombres de esos compañeros, nombres todos conocidos por las viejas y nuevas generaciones, muchos de ellos amigos hoy alejados entre sí pero que guardan lazos inalterables del pasado y no sólo por los años de Videla, sino también por los de Onganía y más lejos aún. Hasta podría decirse que todos son hijos del ´55.

   No hace tanto un cumpleaños de un querido y respetado periodista reflejado en otro lugar de esta misma página con el cariño que se merece, reunió a buena parte de colegas, hijos del mismo partido que trascendió al muro pero que ahora están tan divididos que no pudieron compartir en plena libertad interior la alegría del encuentro. Se reconocieron, se saludaron pero se ubicaron en sus respectivos bandos, lo cual obligó al homenajeado a repartir su atención entre los unos y los otros. Unos están con el gobierno y otros en contra, igual que en el ´46.

   El domingo 30 de septiembre, Orlando Barone –el vete de 6,7,8- invitaba a encontrar una explicación acerca del cambio de periodistas progres que hoy aparecen en la vereda de enfrente, honesto planteo que lo incluía a él por haber realizado la misma parábola en sentido contrario, si bien su cambio fue dejando sus pistas con anterioridad a su irrupción en las pantallas de Canal 7. Lo prueba su paso como columnista por el programa radial matutino de Víctor Hugo Morales, el oriental argentinizado de ineludible mención en este partido en el que él está jugando muy bien de defensor. Y por amor a la camiseta, la contraria de Clarín, diario que no lee pero que le quita el sueño. Primero fue Barone, después, con la ley de Medios, fue Morales.

   Las plumas de Clarín vienen de lejos, son muy profesionales y siempre procurarán en el Gobierno el corte que permita despellejarlo. No fue así en otros tiempos, con Néstor, sin ir más lejos; es así con Cristina y por la ley de medios. Y más si les dejan la pelota picando en el área a quienes, al margen de Héctor Magnetto, no creen realmente en la honestidad en todo sentido del kirchnerismo.

   El último domingo, uno de esos grandes guerreros recibió del frente contrario una mención de tono intimista y con un afecto implícito acerca de un dardo de su autoría que había hecho blanco en Cristina al concederle a sus dichos comparativos en Harvard como propios “de una señora gorda”. Y como contó alguna vez Ramón La Cruz que luego de sus inolvidables peleas con Abel Cachazú en los siempre colmados Luna Park de la época “nos bañábamos juntos y nos íbamos a comer”, aquí el viejo guerrero y más influyente aliado de Cristina le habló al otro como “mi viejo compañero en la guerrilla peronista”.

   Los periodistas de la generación de los setenta están discutiendo por Cristina y por lo que viene después, especialmente después de ciertas agitaciones cuarteleras. Unos y otros saben que Perón fue más Perón después del ´55. Y que a cada gobierno peronista sucedió el desastre. Lo novedoso de esa discusión es que por primera vez está como parte y no como relato el propio diario de Noble, nacido en 1945, igual que el peronismo.

Demarchi o La Isla del Tesoro

La mayoría de los porteños desconocían hasta hace poco la existencia de una isla próxima al centro de su ciudad. El descubrimiento llego de la mano del anuncio presidencial del proyecto de un polo audiovisual en la portuaria Demarchi . Como en un film hollywoodense, los efectos especiales de la presentación, que pusieron el énfasis en el necesario y loable apoyo a la actividad cinematográfica, ocultaron su lado oscuro , se trata de una nueva operación de desposesión de tierra publica, dando curso a un nuevo emprendimiento inmobiliario que aprovechara su privilegiada ubicación con frente al Rio de la Plata. 

La isla del tesoro tiene doce hectáreas, donde se planea construir torres de vivienda y oficinas premium a un costo mínimo de 3.000 dólares el m2. La ONABE, Agencia de Administración de Bienes del Estado, le cederá el predio al Anses, que creara una sociedad anónima, cuyas acciones serán paulatinamente cedidas a empresas privadas que se harán cargo de materializar el proyecto. Solo el 20 %, un paquete minoritario, quedara en manos del Estado. El modelo no difiere demasiado del utilizado por el gobierno de Grosso en la creación de la Corporación Puerto Madero.

A quienes se dirige la tentadora oferta? Los elegidos son IRSA y Consultatio, principales operadores de bienes raíces del pais .IRSA ya es socia del Estado, como miembro mayoritario del directorio del BHN.SA, administrador fiduciario del Procrear. Es también dueña de los principales shoping, edificios corporativos, hoteles cinco estrellas y varios emprendimientos como las torres Horizons en Vicente Lopez. La empresa dirigida por Eduardo. Elsztain, posee próxima a la isla, la ex ciudad deportiva, que compro en 1997 a 50 millones de pesos, para desarrollar la maga obra Solares de Santa Maria, un emprendimiento de similares características al propuesto, en Demarchi pero sobre un terreno de 70 hectáreas . Se aseguraría la propiedad de un frente continuo de rasgos excepcionales que no tiene precedente en el país

Consultatio pertenece a Eduardo Constantini, conocido por ser el dueño del museo MALBA que alberga su colección privada de arte americano y sobre todo por Nordelta, el mayor complejo de barrios cerrados, situado en la zona norte en el partido de Tigre. Sobre una superficie de 1.600 hectareas contiene 10 barrios y 500 condominios, con todo el equipamiento necesario para asegurar el consumo de sus 50.000 habitantes. La homogénea ciudad de los rubios, tiene casi la misma dimensión que el total de los 86 los lotes que en todo el país puso el Estado a disposición de la segunda etapa del Procrear. La diferencia está en el factor de ocupación. Mientras que en el plan nacional prevé vivienda para 200.000 familias, en la ciudad pueblo de Constantini solo vive el 5 % de esa cantidad, menos de 10.000 familias.

Ambas empresas tuvieron su despegue en los 80 y 90, en pleno auge neoliberal, en base a especulación con divisas y bienes, Constantini agente bursátil representante de capitales suizos y escandinavos y Elsztain como partner de George Soros, el financista poseedor una de las diez fortunas mas grandes del mundo, a quien el dueño de IRSA, según sus palabras, le hizo ganar en su paso golondrina por la Argentina, mas de 500 millones dólares.

Estos socios, a quien la señora presidenta apuesta integrar, también tienen su negocios con el gobierno de Mauricio Macri, que en subasta privatizo los últimos tres terrenos públicos que quedaban en la zona de Catalinas, para Consultatio por la suma de 46 millones de dólares, otro para IRSA, el tercero para el banco Macro, en ellos se construirán skyline de 40 pisos de oficinas.

A pesar de la magnitud del predio afectado , solo trascendió una mínima polémica sobre quien tiene el patrimonio de adjudicarse la paternidad de hacer un polo audiovisual, la nación o la ciudad, obviando toda referencia al nuevo despojo de tierra pública. Para la isla Demarchi la única opción no debe ser un nuevo negocio para las corporaciones .En el 2009 la propia presidenta inauguro allí una escuela, destacando el compromiso con la reactivación ferro portuaria y de vías navegables. Cuando se anunció el Procrear, en un solo distrito el Estado no aporto lotes para el proyecto, la CABA, pocos meses después aparece un predio de 12 hectáreas en una inmejorable ubicación para un proyecto cinco estrellas.

El mercado sigue definiendo el patrón de segregación espacial de la ciudad, decide y asigna los segmentos conforme a su lógica social y espacial. Para los inversores top , la vista al Rio de la Plata, para los más pobres el contaminado Riachuelo. Los barrios congelados como maquetas o gigantografias en 3D, sin vinculo con el tejido social , mayormente deshabitados, siguen extendiéndose, Puerto Madero se prolongara hacia la Boca, en el llamado dique cero, dibujando una panorámica postal con perfil edilicio “ steel and glass”.

El rio, donde hace no mucho se recreaba una parte importante del pueblo, se ha convertido en belleza escénica para pocos privilegiados, que además no lo usan, pues prefieren el seguro refugio de sus amenities en el condominio cerrado. La costa norte se volvió costanera, cortada por el aeroparque y el complejo costa Salguero y la costa sur fue capturada por el relleno fruto de las demoliciones del intendente de la dictadura, el brigadier Cacciatore y el posterior sector de Puerto Madero

El proyecto Isla Demarchi vuelve a poner en cuestión que tipo de ciudad produce el negocio inmobiliario y como se la configura con políticas urbanas que no han variado en décadas. Sigue primando pensar lo público desde lo privado, el espacio común es solo un área residual, difícil de controlar y costoso de administrar, una apetecible porción a transformar en mercancía. La lógica de la puesta en valor de un sector, no supone mejor calidad de vida para los habitantes de la ciudad, particularmente para quienes más lo necesitan, encierra la búsqueda de apreciación especulativa de los bienes raíces incluidos en el área de influencia.

La escasez de suelo urbano en las áreas centrales de las metrópolis como Buenos Aires, concentra el interés del capital globalizado que frente como parte de su actual modo de acumulación y ante la caída de las tasas de ganancia en otras áreas, busca refugio en bienes no renovables, insustituibles.

Históricamente la vía para “fabricar” tierra urbana negociable ha sido la des-ruralizacion, ganarle territorio al rio y privatizar espacio público. Con distintas intensidades esta mecánica se sigue aplicando con los peores resultados para la comunidad. Cada pliegue de la costa puede ser lugar propicio para volcar escombros, una chacra rápidamente deviene en country y el espacio público es escaneado exhaustivamente para hallar su perfil rentable, asi emergió la isla Demarchi, aunque no es el único objetivo , la ciudad tiene aún mucha tierra no privatizada, el problema, la línea de tensión , como lo señalan sin eufemismos funcionarios del gobierno de Macri, es que están ocupadas, no son barrios donde viven miles de familias, para ellos, las villas son solo tierras ocupadas. Por eso no se aplica la ley 148 de urbanización de villas y asentamientos, en su visión no hay nada más que “ lex mercatoria”. (Silvio Schachter)