Seguimos
con nuestra selección dominical de Tres mil historias de frases y palabras
que decimos a cada rato, de Héctor Zimmerman, Editorial Aguilar.
Napoleón era
Primer Cónsul cuando su ministro Talleryand lo previno acerca de una
conspiración de los aristócratas emigrados. Como probable cabecilla, señaló al
joven duque de Enghien –hijo único del duque de Borbón– quien residía con su
mujer en un pueblo alemán muy próximo a la frontera.
Napoleón no
vaciló en violar territorio extranjero y, esa noche, lo hizo secuestrar por su
policía secreta. Sin oportunidad de probar su inocencia, el duque de Enghien
fue sometido a una parodia de juicio y fusilado cerca de París.
El hecho causó
enorme indignación en toda Europa, e impidió para siempre un arreglo con los
borbones.
“Es peor que
un crimen, es un error”, comentó Telleryand en una confidencia.
La frase es
descarnada. Un cínico como él podía comprender una atrocidad. Una equivocación
le resultaba imperdonable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario