domingo, 11 de marzo de 2012

Ligarlas Todas


Seguimos con nuestra selección dominical de Tres mil historias de frases y palabras que decimos a cada rato, de Héctor Zimmerman, Editorial Aguilar.

En su sentido más amplio, ligar es unir, alear, adherir. En ciertos juegos de naipes se llama liga a la reunión de dos o más cartas que suman puntos importantes en la partida. Esta significación afortunada también está presente en la liga que la recién casada arroja a las solteras en la fiesta de matrimonio.

¿Por qué, entonces, el verbo ligar supone muchas veces un hecho indeseable?

Se liga un reto, una multa, una paliza (y hay pesimistas que se quejan de ser siempre ellos “los primeros en ligarla”).

Es muy probable que ese mal sentido de la frase se deba a un modo de cazar pájaros, que se vale de un pegamento también llamado liga, y que los chicos suelen utilizar como trampera. Con esa liga untan la corteza de los árboles, de modo que todo pájaro que allí se posa queda atrapado.

Puede suceder que las cartas vengan mal barajadas. Acaso ocurra que una seguidilla de contratiempos y disgustos nos abrume de pronto sin darnos respiro. Lo cierto es que quien queda pegado a una mala racha tiene razón en sentir que el azar lo ha condenado a ligárselas todas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario