viernes, 3 de diciembre de 2010

Cinco siglos igual


Formosa, entre la miseria y el drama, la represion. Estremecedor y contundente reflexion de Silvana Mel, para la Agencia Pelota de Trapo

La lucha por una tierra donde pisar firme. Donde nacer, sobrevivir apenas, morir temprano. Pero la tierra propia, donde echar semilla y que crezca la brizna como un sueño y después la hoja, el fruto, el alimento y otra vez el ciclo inexorable de la vida. Soledad sobre ruinas, sangre en el trigo rojo y amarillo, manantial del veneno, escudo, heridas. Cinco siglos igual.
Casi el 60 por ciento de los pobladores de Formosa viven bajo la línea de la pobreza o la indigencia.
Gildo Insfran gobierna desde 1995 una de las tierras más castigadas por la miseria. Entre Chaco y Formosa se amontonan los tobas. Los qom -hombres- como prefieren llamarse por pura dignidad, por esa pura dignidad por la que se sostienen en pie a pesar de la desnutrición, la tuberculosis, la sífilis, la carencia de atención sanitaria -si no fuera por los chamanes ya se habrían extinguido para tranquilidad de los buitres de la tierra ajena-, por esa pura dignidad es que rechazan el tová que le asestaron los conquistadores porque los veían frentones a esos seres extraños a los que descubrieron. Y que se rapaban el cuero cabelludo en la zona frontal cuando moría un ser querido.
Donde se acaba el país, allá arriba, está Formosa. Y los qom, seis mil familias empujadas a su propia frontera en las cinco mil hectáreas que ocupan desde la historia inmemorial. Que son propias por origen, por preexistencia, por ancestros. Los quince años de Insfran, justicialista de cualquier gobierno -típica supervivencia aluvional de cucaracha de los gobernadores feudales argentinos- no fueron diferentes de los cinco siglos que la incluyen. Porque son cinco siglos igual. Rodeados de plantaciones de algodón que no les pertenecen. Empujados por límites cada vez más cercanos. Tal vez un día terminen abrazándose amontonaditos en una celda de selva de dos por dos, infectándose juntos de chagas y saqueos. Si no los mata antes la policía.
Es la tierra lo que los muere. Es la tierra lo que les sacan. Es su riqueza en la miseria más atroz. Es la voracidad por los algodonales y los sojales y el dedo índice humedecido que cuenta los billetes.
En octubre de 1947 cientos de hombres y mujeres fueron masacrados por la gendarmería. Los mismos que se empeñan en conservar su lengua en una tierra donde los médicos sólo hablan la propia y jamás entienden que se están muriendo y en la escuela les enseñan a Pizarro y a Saavedra en español y ellos sólo quieren ser qom, encerrados en La Primavera, donde Roberto López se prepara a ser sólo huesitos en su tumba hasta donde lo derrotó una bala de la policía.
Es la tierra. La tierra madre y cobijadora. La tierra que les pertenece. Es la identidad, esa marca a fuego en la piel ajada que todavía sopla furias de todos los tiempos. La que les quieren arrebatar, una vez más, cinco siglos igual.
Por eso cortaron la ruta. Para ser visibles una vez en la historia. Como todos los excluidos de la Argentina. Impedir el paso para decir estamos aquí, somos, nos nombramos como comunidad, como hombres y mujeres. Como niños rotos y con el futuro talado. Aquí estamos, con techos de hojas de palma. Pero vivos.
La policía desalojó a machetazos, a palos, a tiros el corte de la ruta 86. Roberto López quedó en el camino. Tenía 52 años. Gente de más de 60, con los ojos semicerrados por la atávica resignación tiene ahora los brazos azules, las piernas con círculos morados, los huesos rotos. No sólo es el hambre, la sequía impiadosa, el agua podrida, el hospital en otro mundo, la panza tomada por la gastroenteritis. También los golpes. La marca aviesa, ruin, de los golpes.
Fue una decisión política, dice el Gobierno Nacional, no reprimir la protesta social. Pero ellos no son de acá. Serán, tal vez, de todos los tiempos. O de ninguno. Son originarios que pretenden quedarse en paz donde viven desde hace 520 años. Cinco siglos igual. Son distintos, hablan distinto, creen distinto, se mueren distinto. Su corte de una ruta no es igual que otros cortes de una ruta.
Son pobres, otros, ajenos, morenos, pertinaces en una cultura que ya no existe. Que fue atropellada por la soja, los alambrados, la invasión terrateniente, el estado ciego y cómplice, el Insfran que gobierna desde hace quince años una de las provincias más condenadas del país, el silencio de los que gobiernan y de los que quieren gobernar.
No hay multitudes ni discursos opositores ni despliegues mediáticos que pongan el ojo en La Primavera. Como insisten en llamarse, porfiados aunque les venga el invierno porque así son los qom con su tierra, aun cuando los tiraron en las celdas y el agua caliente de a baldes impedía que durmieran. Les quemaron los ranchos. Una bala atravesó a un policía que quedó muerto en las banquinas ya rojas de la ruta. Ellos preguntan qué bala. Pocos imaginan a los qom con armas de fuego. Pocos imaginan a los qom arrebatando la vida cuando sólo desean vivir la propia en paz, pisando su vieja tierra de lombrices y verdores.
"Cayó una lágrima muy grande acá en la comunidad", dice Dalmacio y en su palabra cae el chaparrón diluvial de todas las lágrimas de la historia. En asamblea decidieron que no van a bajar el reclamo por la tierra.
Una lágrima muy grande cae de cualquier cielo. Corre por la ruta 86, como un río torrentoso.
La justicia, la policía, el gobernador Gildo Insfran de los quince años. Ninguno de ellos podrá a balazos con una lágrima.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Haiti: normalidad fraudulenta en la perla del Caribe


Panorma sobre el nuevo fraude que sacude el ya desgarrado Haití, con precisiones interesantes de nuestro, ya colaorador, Norberto Emmerich, docente, licenciado en Relaciones Internacionales y Doctor en Ciencia Política.

El pasado domingo 28 de noviembre hubo elecciones en Haití. Se presentaron 18 candidatos presidenciales, debía elegirse además a 99 diputados y a 11 de los 30 miembros del Senado. La favorita en las encuestas era Mirlande Manigat, esposa del ex presidente Leslie Francois Manigat, con un 30% de las preferencias. En segundo lugar se ubicaba Jude Celéstin, el candidato oficialista, designado por el actual presidente René Preval, con un 20%.

Manigat, miembro preclaro de la elite haitiana, es doctora en Ciencias Políticas de la Universidad de la Sorbona, opositora al actual presidente y propone una retirada gradual de la Minustah. En principio ningún candidato parece haber superado el 50% de los votos y según la ley haitiana se realizará una segunda vuelta electoral el 16 de enero. De ser así, sería la primera vez que las elecciones haitianas desembocan en ballotage.

Estas elecciones son las que debieron celebrarse el 7 de febrero, pero fueron postergadas por el terremoto. Ante la epidemia de cólera, 4 candidatos pidieron que se aplazaran nuevamente, pero el gobierno decidió que todo siguiera su curso normalmente.

La jornada electoral estuvo signada por masivas protestas y denuncias de fraude. Doce de los 18 candidatos a presidente emitieron una declaración conjunta reclamando la anulación de los comicios. El Consejo Electoral Provisional afirmó que las elecciones no serían anuladas y los resultados se conocerían el 10 de diciembre, aunque confirmó que ningún candidato alcanzó la mayoría absoluta y habrá segunda vuelta.

El fraude no es novedad en Haití, donde el control de Naciones Unidas y la OEA ya lo convalidó en las elecciones de 2006 cuando René Preval asumió la presidencia en primera vuelta, mediante el conteo creativo del Consejo Electoral por el cual Préval pasó del 47% inicial a un 51.5% definitivo.

El 12 de enero de 2010 un terremoto de 7.0 grados en las escala de Richter provocó la destrucción total de la ciudad de Puerto Príncipe, capital del país, y la muerte de 300.000 personas. En consecuencia 1 millón y medio de personas quedaron sin vivienda y viven como refugiados en su propia ciudad, en 1.300 campamentos improvisados en parques y plazas de Puerto Príncipe, muchos de los cuales debieron ser desplazados por el paso del huracán Tomás, el 5 de noviembre. Sobre un padrón nacional de 4.5 millones de votantes la mayoría está sin hogar. Las denuncias de fraude indican que muchas personas votaron con documentos de personas fallecidas en el terremoto.

Rebelión contra Naciones Unidas

El 19 de octubre se detectó el primer caso de cólera. Ya hay más de 1600 muertos (la mayoría en el interior, menos del 10% en Puerto Príncipe). Por disposición del Ministerio de Salud los cadáveres no son admitidos en la morgue del hospital y son enterrados en fosas comunes, anónimas, sin cruces ni flores, donde también fueron enterrados los muertos por el terremoto de enero. Las fosas se encuentran en Saint Marc, a dos horas y media de Puerto Príncipe.

Tres personas muertas y más de 30 heridos es el saldo de las manifestaciones contra los soldados de Naciones Unidas desplegados en el país. Grupos de manifestantes formaron barricadas, quemaron vehículos y protagonizaron tiroteos con los cascos azules en varias ciudades del país. También hubo bloqueo de caminos, puentes y aeropuertos. Las protestas acusaban al batallón nepalí de haber importado el cólera al país. El batallón está asentado precisamente en Saint Marc, en la región de la Artibonite, al norte de Puerto Príncipe, una zona afectada con casi la mitad de los muertos de cólera y donde los choques contra las tropas de Naciones Unidas han sido más violentos. Mientras Haití nunca ha conocido el cólera hasta ahora, en Nepal el cólera es una enfermedad endémica que no ha podido ser erradicada en varias décadas. El brote haitiano comenzó a los pocos días de la llegada del contingente nepalés. El hecho de que no haya antecedentes de cólera en Haití hace que la población no esté inmunizada, no elaboraron defensas para la enfermedad. Y por la falta de antecedentes la gente está aterrorizada ante una enfermedad que desconoce.

En Haití no hay redes de desagües cloacal, solo el 12% dispone de agua corriente y solo el 17% tiene vive en condiciones higiénicas adecuadas. El terremoto empeoró todo. Los campamentos donde vive más de un millón de personas carecen de instalaciones donde lavarse las manos o tomar agua potable.

Naciones Unidas insistió en que todas las pruebas realizadas en el campamento nepalí, que se encuentra a orillas del río Artibonite donde se originó la epidemia, han dado resultado negativo, pero aceptó que la cepa es de origen sudasiático. El embajador Sueco en Haití, Claes Hammar, afirmó que sin ninguna duda la cepa proviene de Nepal.

Fidel Castro afirmó que América Latina estuvo libre de cólera por más de 100 años hasta que la enfermedad apareció en la costa del norte de Perú en 1991 y se propagó rápidamente. La bacteria haitiana es exactamente la misma que el vibrión colérico peruano de 1991.

Para Naciones Unidas grupos extremistas sin identificar organizaron las protestas para boicotear las elecciones. Ningún funcionario pudo precisar de qué grupo se trataba, ni tampoco decir cuál sería el rédito político de boicotear las elecciones. Deben ocultar que el principal partido político del país, Fanmi Lavalas, está proscripto y su líder Jean Bertrand Aristide, tiene prohibido el ingreso al país tras el golpe de Estado que lo separó de su cargo en el año 2004.

Es muy probable que los manifestantes pertenecieran a ese partido y expresaran así su rechazo a esta farsa electoral que indultará los crímenes y fraudes de René Preval, el actual presidente, y convalidará el status de ocupación de la Minustah, la fuerza de Naciones Unidas comandada por Brasil, y de las fuerzas norteamericanas acantonadas en Haití desde el terremoto de enero, que no han hecho nada para la reconstrucción del país.

El país está ocupado, el Consejo Electoral Provisorio (CEP) depende totalmente del Poder Ejecutivo, hay un millón y medio de personas que vive en campamentos. En este contexto el gobierno gasta 29 millones de dólares en un proceso electoral viciado de nulidad. No se conoce cómo se ha conformado el padrón electoral y todo el proceso está bajo la supervisión armada de la llamada comunidad internacional.

La situación haitiana

El informe de la misión del Consejo de Seguridad a Haití del 11 al 14 de marzo de 2009, dice que Haití había tenido graves contratiempos debido a los efectos combinados de la crisis económica mundial, la crisis alimentaria y las consecuencias de la temporada de huracanes a partir de agosto de 2008, que provocaron daños por un valor equivalente al 15% del PBI haitiano (900 millones de dólares) y que afectaron particularmente a la ciudad de Gonaives.

La crisis económica mundial impactó fuertemente en la economía de Haití ya que el 40% del PBI del país se nutre de las remesas de los trabajadores emigrados. 1.1 millones de personas viven directamente de las remesas internacionales. Desde diciembre de 2008 aumentaron los incidentes civiles violentos y solo en febrero de 2009 hubo 69 manifestaciones, la mayoría por motivos socioeconómicos. Este año 2010, con una caída del 9% en el PBI, la dependencia internacional será aún mayor.

La crisis alimentaria también produjo grandes manifestaciones en el trascurso de 2008, con su pico en el mes de abril. Las fuerzas de la Minustah reprimieron las marchas y el presidente Preval pudo mostrar su liderazgo al hablar al país tres días después de iniciadas las protestas. Esta asociación entre intervención militar extranjera y liderazgo político sumiso sostiene la gobernabilidad del régimen haitiano.

Para las elecciones a renovación parcial del Senado del 19 de abril de 2009 el Consejo Electoral Provisional decidió no aceptar a ningún candidato del partido Fanmi Lavalas. El informe del Consejo dice que “los miembros de la misión señalaron con firmeza al Consejo Electoral Provisional que debía hacerse todo lo posible para corregir la percepción de exclusión que tenían algunos sectores de la población debido a que un grupo político importante no iba a participar en las elecciones”. Estas elecciones de renovación parcial del Senado se realizaron en abril de 2009 con la exclusión y boicot del principal partido del país, el Fanmi Lavalas. El juez que avaló la presentación de las candidaturas del Fanmi Lavalas, fue destituido directamente por el presidente Preval. El escandaloso proceso electoral fue financiado, resguardado y controlado por la Minustah.

El lenguaje intervencionista aparece claramente en el informe: “el establecimiento de instituciones de gobierno legítimas y que rindan cuentas sigue siendo esencial para la consolidación de la estabilidad en Haití. Pese a los esfuerzos de la Minustah, en colaboración con los principales asociados, para aumentar la capacidad institucional de Haití, tanto el gobierno central como la administración local siguen padeciendo de una capacidad limitada para prestar servicios básicos. La salud y la educación se cuentan entre los ámbitos en que la capacidad del Estado es más deficiente”. Lógicamente la recomendación de la misión es que “el gobierno de Haití debe aprovechar plenamente el apoyo internacional a fin de crear capacidad para prestar los servicios que el pueblo necesita”.

Como ejemplo de esa supuesta incapacidad del Estado haitiano el informe menciona “las prolongadas controversias respecto del pago de sueldos a los maestros y las graves protestas laborales que han paralizado algunos hospitales de la capital”.

A pesar de todo lo que Naciones Unidas puedan decir de lo imprescindible de su intervención en Haití, el informe sostiene que “los niveles actuales de pobreza extrema son claramente incompatibles con la estabilidad de Haití a largo plazo”. Esta afirmación de que Haití sigue siendo estructuralmente igual que cuando comenzó la intervención hace 6 años, solo lleva a que el informe afirme que “los interlocutores en Haití destacaron la importancia de seguir colaborando con la comunidad internacional para poner en práctica una estrategia de reconstrucción y desarrollo en Haití”. La verdad es que la situación de Haití después del terremoto de enero revela más el fracaso de las organizaciones internacionales responsables de la reconstrucción que las falencias del Estado. No hay nada en Haití que se haga independiente de la tutela de las grandes organizaciones internacionales. Y lo que queda claro es que no hay un plan de reconstrucción de Haití.

Aunque Estados Unidos participa directamente en esta supuesta reconstrucción, mediante una fuerza militar de 10 mil hombres y mediante la tarea del enviado especial de Naciones Unidas a Haití, el ex presidente Bill Clinton, ni un solo dólar de los 1.150 millones de dólares prometidos, ha llegado a destino.

La Minustah

Las Naciones Unidas intervienen en Haití a partir de febrero de 1993 cuando se desplegó una operación conjunta de las Naciones Unidas y la OEA. El 30 de abril de 2004 se decidió establecer la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas en Haití (Minustah). El comando de la fuerza quedó en manos de Brasil y los países intervinientes son: Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Croacia, Ecuador, Estados Unidos, Filipinas, Guatemala, Jordania, Nepal, Paraguay, Perú, Sri Lanka y Uruguay. Todos los países sudamericanos participan en la fuerza, excepto Venezuela (Colombia contribuye con personal policial). Venezuela lleva adelante su programa PetroCaribe, que genera un ingreso de casi 200 millones de dólares al fisco haitiano. El presupuesto anual de la Minustah es de 600 millones de dólares y la fuerza está compuesta por 12.000 soldados.

El ingreso de la Minustah en Haití se da a continuación del golpe de Estado franco-norteamericano contra el presidente Aristide, su secuestro y deportación a Sudáfrica, país que en 2004 había desatendido la sugerencia estadounidense de no asistir a las festividades por los 200 años del nacimiento de la primera república negra de la historia. El entonces presidente sudafricano Thabo Mbeki fue el único mandatario extranjero presente en esos actos celebratorios.

Desde que la Minustah ingresó en Haití se multiplicaron las denuncias sobre la responsabilidad de las fuerzas en violaciones de niñas y mujeres haitianas y del robo de animales a los campesinos. Además las fuerzas extranjeras son causantes de la represión y de los asesinatos a militantes en los barrios populares.

En ocasión del terremoto de enero casi todos los 6 mil efectivos de la Minustah en Puerto Príncipe se abocaron al trabajo de rescatar a los miembros de Naciones Unidas que estaban en el Hotel Christophe y en el Hotel Montana. Como dice Omar Ribeiro Thomaz, “la ONU ayuda a la ONU, los haitianos ayudan a los haitianos”. La Minustah no se hizo cargo del abastecimiento, de los trabajos de voluntariado ni de organizar a la población. Fue la misma población la que se organizó, improvisando tiendas y barracas. Ningún vehículo de la Minustah patrulló la ciudad, no organizó la distribución de agua ni de comida, no se encargó de la búsqueda de cadáveres, no impidió los pocos saqueos que hubo. No hubo presencia de Naciones Unidas ni de ninguna organización internacional. La única fuerza que recorría las calles de Puerto Príncipe recogiendo los cadáveres era la prefectura de Puerto Príncipe. La red de comerciantes llamada Madanm Sara, que conecta a Puerto Príncipe con el interior y el exterior del país, garantizó la llegada de los alimentos a la ciudad en la noche siguiente al terremoto.



domingo, 28 de noviembre de 2010

Correr el albur


Seguimos con nuestra selección dominical de Tres mil historias de frases y palabras que decimos a cada rato, de Héctor Zimmerman, Editorial Aguilar.


El significado de esta expresión es conocido: aventurarse en una empresa corriendo un riesgo. Menos sabido es que albur es un pez de río de escamas plateadas y comestible. No es más difícil de pescar que cualquier otro, de modo que ninguna conexión tiene la frase con la necesidad de que el pescador corra tras él. La explicación, como en muchos casos, está en los naipes. Albur se emplea en el juego del monte para referirse a ciertas cartas (las dos primeras) que saca el banquero y que pueden ser favorables tanto a la banca como al que apuesta. Se entiende así por qué el diccionario da como otra acepción de albur la de contingencia: al igual que en el juego y que en la vida, todo puede ocurrir por causa del albur (la misma idea está presente en el truco, cuando alguien acepta y va a la pesca para probar su suerte). Pez o naipe, lo cierto es que aquel que arriesga puede perder mucho pero el pálpito, el sabor del desafío o el frío cálculo aconsejan muchas veces "correr el albur".

sábado, 27 de noviembre de 2010

Haití: el subdesarrollo y el genocidio


Fidel, con lucidez inalterable, aporta reflexiones para entender un poco la desgarradora situacion de Haití. Hace unas horas y lo comparto con todos los amigos.

Hace solo unos meses, el 26 de julio de 2010, Lucius Walker, líder de la organización norteamericana Pastores por la Paz, en un encuentro con intelectuales y artistas cubanos, me preguntó cuál sería la solución para los problemas de Haití.

Sin perder un segundo le respondí: “En el mundo actual no tiene solución, Lucius; en el futuro del que estoy hablando sí. Estados Unidos es un gran productor de alimentos, puede abastecer a 2 000 millones de personas, tendría capacidad para construir casas que resistan a los terremotos; el problema es la forma en que se distribuyen los recursos. Al territorio de Haití hay que restituirle otra vez hasta los bosques; pero no tiene solución en el orden actual del mundo.”

Lucius se refería a los problemas de ese país montañoso, superpoblado, desprovisto de árboles, combustible para cocinar, comunicaciones e industrias, con un elevado analfabetismo, enfermedades como el VIH, y ocupado por las tropas de Naciones Unidas.

“Cuando esas circunstancias cambien -le añadí- ustedes mismos, Lucius, podrán llevarle alimentos de Estados Unidos a Haití.”

El noble y humanitario líder de Pastores por la Paz falleció mes y medio después, el 7 de septiembre, a la edad de 80 años, legando la semilla de su ejemplo a muchos norteamericanos.

No había aparecido todavía una tragedia adicional: la epidemia del cólera, que el 25 de octubre reportó más de 3 000 casos. A tan dura calamidad se suma que el 5 de noviembre un huracán azotó su territorio, causando inundaciones y el desbordamiento de los ríos.

Este conjunto de dramáticas circunstancias merece dedicarle la debida atención.

El cólera apareció por primera vez en la historia moderna en 1817, año en que se produjo una de las grandes pandemias que azotaron a la humanidad en el siglo XIX, que causó gran mortalidad principalmente en la India. En 1826 reincidió la epidemia, invadiendo a Europa, incluyendo a Moscú, Berlín y Londres, extendiéndose a nuestro hemisferio de 1832 a 1839.

En 1846 se desata una nueva epidemia más dañina todavía, que golpeó a tres continentes: Asia, África, y América. A lo largo del siglo, epidemias que afectaban a esas tres regiones se fueron repitiendo. Sin embargo, en el transcurso de más de 100 años, que comprende casi todo el siglo XX, los países de América Latina y el Caribe se vieron libres de esta enfermedad, hasta el 27 de enero de 1991, en que apareció en el puerto de Chancay, al norte de Perú, que primero se extendió por las costas del Pacífico y después por las del Atlántico, a 16 países; 650 mil personas se enfermaron en un período de 6 años.

Sin duda alguna, la epidemia afecta mucho más a los países pobres, en cuyas ciudades se aglomeran barrios populosos que muchas veces carecen de agua potable, y las albañales, que son portadoras del vibrión colérico causante de la enfermedad, se mezclan con aquellas.

En el caso especial de Haití, el terremoto deshizo las redes de una y otra donde estas existían, y millones de personas viven en casas de campaña que muchas veces carecen incluso de letrinas, y todo se mezcla.

La epidemia que afectó nuestro hemisferio en 1991 fue el vibrión colérico 01, biotipo El Tor, serotipo Ogawa, exactamente el mismo que penetró por Perú aquel año.

Jon K. Andrus, Director Adjunto de la Organización Panamericana de la Salud, informó que la bacteria presente en Haití era precisamente esa. De ello se derivan una serie de circunstancias a tomar en cuenta, que en el momento oportuno determinarán importantes consideraciones.

Como se conoce, nuestro país viene formando excelentes médicos haitianos y prestando servicios de salud en ese hermano país desde hace muchos años. Existían problemas en ese campo muy serios y se avanzaba año por año. Nadie podía imaginar, por no existir antecedentes, que se produjera un terremoto que mató a más de 250 mil personas y ocasionó incontables heridos y lesionados. Frente a ese golpe inesperado, nuestros médicos internacionalistas redoblaron sus esfuerzos y se consagraron a su trabajo sin descanso.

En medio del duro desastre natural, hace apenas un mes se desató la epidemia de cólera con gran fuerza; y como ya expresamos, en tales circunstancias desfavorables se presentó el huracán.

Ante la gravedad de la situación, la Subsecretaria General de las Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Valerie Amos, declaró ayer que se necesitaban 350 médicos y 2 000 enfermeras más para hacer frente a la enfermedad.

La funcionaria llamó a extender la ayuda más allá de Puerto Príncipe, y reveló que los suministros de jabón y de agua limpia solo llegan al 10 por ciento de las familias instaladas fuera de la capital, sin señalar a cuántos llegaban en esa ciudad.

Diversos funcionarios de Naciones Unidas lamentaron en los últimos días que la respuesta de la comunidad internacional al pedido de ayuda hecho para enfrentar la situación no llegaba al 10% de los 164 millones de dólares solicitados con urgencia.

“Amos reclamó una reacción rápida y urgente para evitar la muerte de más seres humanos a causa del cólera”, informó una agencia de noticias.

Otra agencia comunicó hoy que la cifra de haitianos muertos se eleva ya a “1 523 personas, 66 mil 593 han sido atendidas, y más de un millón de habitantes siguen durmiendo en las plazas públicas”.

Casi el 40% de los enfermos han sido atendidos por los integrantes de la Brigada Médica Cubana, que cuenta con 965 médicos, enfermeros y técnicos que han logrado reducir el número de muertes a menos de 1 por cada 100. Con ese nivel de atención el número de bajas no alcanzaría la cifra de 700. Las personas fallecidas, como norma, estaban extremadamente debilitadas por desnutrición o causas similares. Los niños detectados a tiempo, apenas fallecen.

Es de suma importancia evitar que la epidemia se extienda a otros países de América Latina y el Caribe, porque en las actuales circunstancias causaría un daño extraordinario a las naciones de este hemisferio.

Se impone la necesidad de buscar soluciones eficientes y rápidas a la lucha contra esa epidemia.

Hoy se tomó la decisión por el Partido y el Gobierno de reforzar la Brigada Médica Cubana en Haití con un contingente de la Brigada “Henry Reeve”, compuesto por 300 médicos, enfermeras y técnicos de la salud, que sumarían más de 1 200 colaboradores.

Raúl estaba visitando otras regiones del país, e informado en detalle de todo.

El pueblo de Cuba, el Partido, y el Gobierno, una vez más estarán a la altura de su gloriosa y heroica historia.

Fidel Castro Ruz

Noviembre 26 de 2010

domingo, 21 de noviembre de 2010

Como turco en la neblina


Seguimos con nuestra selección dominical de Tres mil historias de frases y palabras que decimos a cada rato, de Héctor Zimmerman, Editorial Aguilar.


La frase es producto de una serie de cambios y derivaciones que comienzan cuando en España se llamó turca a la borrachera. La razón tiene toques de humor. Al vino puro, sin añadido de agua, se lo denominaba tanto vino moro corno vino turco, por no estar "bautizado". En consecuencia, las mamúas tomaron el nombre de turcas. De allí viene la primera parte de la expresión en su forma original: "agarrarse una turca". Lo que sigue se debe exclusivamente a la picardía criolla. ¿Quién puede hallarse más confundido que un borracho que se pierde en la niebla? El pasaje de con la turca al actual como turco lo realizó espontáneamente el uso popular. Y así el turco entró en el dicho y en la neblina, dando lugar a una pintoresca expresión que vale para cualquiera que ande muy desorientado. Por más sobrio que esté.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Felices los normales


Va de regalito del ultimo día de la semana un poema del cubano Roberto Fernandez Retamar, uno de los llamados "poetas de la revoluciòn", tambièn ensayista y durante años director de la mítica Casa de las Américas.

Felices los normales, esos seres extraños,
Los que no tuvieron una madre loca, un padre borracho, un hijo delincuente,
Una casa en ninguna parte, una enfermedad desconocida,
Los que no han sido calcinados por un amor devorante,
Los que vivieron los diecisiete rostros de la sonrisa y un poco más,
Los llenos de zapatos, los arcángeles con sombreros,
Los satisfechos, los gordos, los lindos,
Los rintintín y sus secuaces, los que cómo no, por aquí,
Los que ganan, los que son queridos hasta la empuñadura,
Los flautistas acompañados por ratones,
Los vendedores y sus compradores,
Los caballeros ligeramente sobrehumanos,
Los hombres vestidos de truenos y las mujeres de relámpagos,
Los delicados, los sensatos, los finos,
Los amables, los dulces, los comestibles y los bebestibles.
Felices las aves, el estiércol, las piedras.

Pero que den paso a los que hacen los mundos y los sueños,
Las ilusiones, las sinfonías, las palabras que nos desbaratan
Y nos construyen, los más locos que sus madres, los más borrachos
Que sus padres y más delincuentes que sus hijos
Y más devorados por amores calcinantes.
Que les dejen su sitio en el infierno, y basta.

jueves, 18 de noviembre de 2010

Premio a "Paco" Fernandez de Rosa

La Asociación Argentina de Actores entregó los premios Podestá a la "Trayectoria Honorable" en una ceremonia realizada anteayer en el Anexo del Senado, con el el apoyo de la Comisión de Educación y Cultura y la Dirección General de Cultura del Senado. Las palabras del querido Alberto "Paco" Fernandez de Rosa, que recibimos en nuestro mail, nos tocaron profundamente, en lo que se refiere a lo personal, y por la ratificacion de su compromiso, en un tono que a la vez es un signo de los tiempos.

Otorgados por primera vez en 1991, los Premios Podestá fueron creados como "un reconocimiento hacia las actrices, los actores y todos quienes tienen que ver con el espectáculo artístico" y en la lista de homajeados, recibieron la medalla a los 50 años de afiliación Virginia Lago, Santiago Bal, Estela Molly, Liliana Abayieva, Marta González, Julia Sandoval, Julio López, Sergio Renán, Selva Alemán, Laura Bove, Alberto Fernández de Rosa, entre otros.

Reproducimos las palabras de Paco:

La entrega de los colegas representa un hecho de enorme importancia para mi. Es una respuesta a tantas preguntas a la hora de apagar la luz cada noche. Un empujón para seguir poniéndole onda al esfuerzo, para bancar la frustración y apoyarse en la alegría.
Tengo tanto berreta para contabilizar, que poder añadir al haber, donde están los hijos, los nietos, los amigos, el vino con asombro, el amor de a ratos, la revolución (que está llegando en horas nomás, como desde siempre) los libros, las flores y la lluvia, poder agregar, decía, esta medalla que te entregan tus pares y el Senado es celebración de lágrima emocionada.
Dediqué toda mi vida a dos cosas parecidas, son para mejorar la vida y transformar la realidad, por poco que se logre.
El Teatro y la militancia política. Conocí y tuve maestros maravillosos, por nombrar algunos, Luisa Vehil, Margarita Xirgu, Roberto Durán, Inda Ledesma, Oscar Ferrigno, Juan Carlos Gené, y en la militancia, Gustavo Rearte, Sebastián Borro, Fernando Nadra, Ismael Viñas, Rofolfo Puiggros, hasta conocí personalmente al Gral. Perón y a Néstor Kirchner. Por eso le pedí a mi amiga y compañera Cristina Álvarez Rodriguez que me entregue la medalla, porque de alguna manera ella simboliza las dos cosas, es un cuadro militante, dirigente política y además, una persona comprometida con la cultura que quiere mucho a los actores y por añadidura, sobrima nieta de Evita, que también era actriz (lujos que permiten las canas). Quiero compartir con ustedes que por hijos, amigos o compañeros estan cerca.
Un beso grande